Mantener el cálculo del consumo de agua por vivienda en función del número de habitantes, eliminar el canon de impulsión y ofrecer una tarifa muy reducida para los más ahorradores son tres de las principales claves que plantea el grupo municipal de IU en su propuesta de reforma de la tarifa del agua, pero siempre con la premisa de mantener el carácter público de Emasa.
El portavoz del grupo municipal IU-Málaga para la Gente, Eduardo Zorrilla, registró ayer su propuesta de reforma de la tarifa de Emasa, tal y como han hecho el resto de los grupos tras la moción aprobada en el pleno del 23 de julio pasado para estudiar las distintas alternativas.
Zorrilla recalca en su propuesta la necesidad de mantener el cálculo del consumo a partir de los habitantes que hay en cada vivienda, cambio que originó gran parte de las críticas a las tarifas de Emasa. Sin embargo, propone una redistribución de los bloques de consumo para favorecer a los más ahorradores y gravar a los que se encuadran en el último bloque, con más de 6 metros cúbicos por habitante al mes (200 litros diarios por persona).
De esta forma, IU establece cuatro bloques básicos: El primero sería hasta los 4 metros cúbicos por habitante al mes, de acuerdo con un consumo medio de 112 litros establecido por Emasa. Los siguientes bloques serían de 4 a 5 metros cúbicos por habitante al mes; de 5 a 6 metros cúbicos; y más de 6, que sería el que se gravaría más.
Estos bloques se complementarían con una tarifa especial mucho más reducida que premie a los usuarios más ahorradores, con 3 metros cúbicos consumidos por persona y mes. Eso favorecería, en opinión de Zorrilla, que se incentive el ahorro en el consumo de agua.
Otra de las propuestas que plantea IU es eliminar el canon de impulsión, que considera muy injusto; así como mantener la moratoria en los cortes de suministro por impagos de personas y familias sin recursos, aumentando además el fondo social de Emasa para atender el pago de la tarifa de las personas y familias sin recursos.
El portavoz de IU insistió además en la necesidad de mantener a Emasa como una empresa pública y acusó al PP y el PSOE de engordar su deuda de forma artificial mediante cánones municipales que ascienden a los 170 millones de euros desde 1994.
