­ La pérdida de agentes se ceba con la Policía Nacional y la Guardia Civil en Málaga, provincia que ha pasado de sumar 5.510 efectivos a 5.192 entre ambos cuerpos en menos de cuatro años. Este descenso de 318 funcionarios (-6,2%) no es moco de pavo si se tiene en cuenta que es la provincia andaluza que históricamente más actividad policial genera. Esta decadencia cuantitativa en las plantillas de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se observa con claridad en los datos que el propio Gobierno ofrece al secretario general del PSOE en Málaga, Miguel Ángel Heredia, tras formular éste varias preguntas parlamentarias sobre ese asunto. Las respuestas reflejan cómo las cifras decaen anualmente desde 2011, año en el que las plantillas de ambos cuerpos tocaron techo con 5.518 uniformados.

El cuerpo que más está sufriendo la pérdida de efectivos, con mucha diferencia, es la Policía Nacional, institución que además es competente en los municipios más poblados tanto de la Costa como del interior. Tanto es así que, desde noviembre de 2011, cuando sumaba 3.405 agentes, ha dejado por el camino 260 plazas hasta quedarse oficialmente en 3.145, aunque las fuentes sindicales consultadas señalan que la cifra real puede ser ligeramente inferior a los 3.000 policías, un número que cuadra con los datos de la Unión Federal de Policía (UFP), que cifra en un 30% la reducción de la plantilla en cuatro años en relación al catálogo de puestos de trabajo de la Policía Nacional en Málaga. Con estos números, el cuerpo se pone al nivel del año 2010, cuando sumaba 3.048 agentes. El instituto armado, por su parte, presenta un déficit de 58 agentes de la Guardia Civil.

Si bien es cierto que la tendencia negativa se extiende a todas las provincias andaluzas, los datos destacan a Málaga como la que más agentes de uniforme azul pierde. De hecho, los 260 policías que han dejado de trabajar en la provincia suponen 27,5% de los 951 que ha perdido la región. «Es incomprensible que se hayan reducido en más de 300 efectivos el número de efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la provincia en los años de Gobierno del PP», exclama el secretario provincial de los socialistas malagueños. Heredia cree aún más incomprensible que el recorte se produzca sobre todo en la Policía Nacional. «Es inadmisible que siendo una provincia eminentemente turística con necesidades de seguridad primordiales, seamos los que mayor recorte en número de efectivos. Málaga es un destino de primer nivel y no puede tener una seguridad ciudadana de segunda por culpa de las políticas del PP». El socialista recuerda que cuando llega el verano el problema se acentúa debido al incremento de la población. A esto se une la paradoja de que los agentes deben coger vacaciones durante estas fechas. En el caso de la Policía Nacional, la Dirección General de la Policía sugiere que la plantilla se reparta las vacaciones entre julio, agosto y septiembre. Este año, el refuerzo de verano es de 20 agentes.