La incesante pérdida de agentes que sufre la plantilla de la Policía Nacional de Málaga está pasando factura a los que se quedan. Así lo denuncian desde el Sindicato Unificado (UFP) de Málaga, cuyos responsables aseguran que la peor parte se la llevan los agentes uniformados, concretamente los que prestan servicios estáticos de seguridad. «Sobre ellos recae el mayor peso de ese déficit de personal. Los servicios se siguen prestando en las mismas circunstancias que cuando la plantilla de la provincia de Málaga se encontraba al 90% a costa del sacrificio de quienes lo prestan a diario», precisó el sindicato antes de añadir que esto se está traduciendo en bajas psicológicas provocadas por «el estrés, la tensión diaria y la presión que sufren por parte de algunos responsables policiales».

La UFP va más allá señala a la Unidad de Prevención y Seguridad (UPS) de la Brigada de Seguridad Ciudadana: «Son los que más sufren esta situación». Esta organización sindical lamenta que las reiteradas denuncias sobre este asunto que se han remitido a los correspondientes órganos de la Dirección General de Policía no han servido para que se vislumbre alguna solución. «Más bien al contrario, lo que se trata por todos los medios es que no trascienda a la opinión pública», zanjó la Unión Federal de Policía a través de un comunicado de prensa.