La primera jornada de la huelga de Renfe se saldó con una escasa repercusión en el tráfico ferroviario, según informó ayer la compañía. La protesta, pilotada por Semaf y CGT, no será la última que se lleve a cabo este mes en el servicio, ya que las organizaciones sindicales han anunciado nuevas movilizaciones, en este caso, no sólo en Renfe, sino también en el gestor ferroviario Adif. Además, hay tres jornadas de huelga convocadas por Semaf para los próximos días 11, 14 y 15.

La empresa cifró el seguimiento del paro en torno a un 4 por ciento, mientras que los sindicatos apuntaron a una participación de un 90 por ciento de los trabajadores que lo pueden secundar, al no estar incluidos en los servicios mínimos fijados por el Ministerio de Fomento. Semaf, que hace su primera huelga en muchos años al haber logrado en sus anteriores convocatorias llegar siempre a un acuerdo con la empresa, esperó sin éxito hasta última hora de la noche una respuesta de Renfe a sus reivindicaciones.

Los pasajeros de la línea C1 de cercanías fueron quienes más notaron los parones, especialmente en las primeras horas del día, que coinciden con el desplazamiento de trabajadores desde municipios como Fuengirola, Benalmádena o Torremolinos hasta la capital.

El Comité General de Empresa de Adif aprobó esta semana por unanimidad estos parones, mientras que el de Renfe se reunirá el próximo miércoles. El sindicato CCOO intentará alcanzar al respecto el máximo consenso, aunque no lo tendrá fácil en la negociación. Semaf ya adelantó que no respaldará la propuesta, al seguir su propia hoja de ruta.