El secretario general de Podemos en Málaga, José Antonio Vargas, está atravesando una situación delicada dentro de un partido que evidencia, a nivel provincial, unas manifiestas diferencias a la hora de elegir la vía por la que deben acudir a las próximas elecciones generales. El círculo de Podemos de Campanillas ha pedido la dimisión del todavía secretario general de Podemos en Málaga, al que culpan de querer desestabilizar el partido desde dentro, a pocos meses de la inminente cita con las urnas en el mes de diciembre. Según las fuentes consultadas, esta determinación podrá ser secundada en los próximos días por más círculos que están en desacuerdo con la manera en la que Vargas está llevando la formación en Málaga
Frente a los acontecimientos de los últimos meses, en los que el partido liderado por el carismático Pablo Iglesias ha sufrido un viraje de sus postulados iniciales hacia una estrategia más en sintonía con el funcionamiento de los partidos tradicionales, un sector de Podemos, encabezado por el propio José Antonio Vargas, exige una vuelta a los inicios asamblearios de la formación.
Este deseo de Vargas se escenificará con una asamblea general que ha sido convocada durante la celebración del último consejo ciudadano, celebrado el pasado 14 de septiembre y que tendrá como monotema de debate la dialéctica de saber «hacia dónde va Podemos».
La decisión de convocar una asamblea exclusivamente para poner en duda al actual funcionamiento de Podemos ha levantado ampollas entre el resto de los círculos. De los once, sólo tres han apoyado la decisión de Vargas, mientras que el resto acusan al secretario general de tomar esta decisión de forma unilateral. Fuentes internas de Podemos confirman que Vargas estaría perdiendo cada vez más apoyo y que, únicamente, estaría flanqueado por el núcleo de militantes de Izquierda Anticapitalista Revolucionaria (IZAR). Entre las peticiones de Vargas, se encuentran entre otras, debatir sobre posibles pactos postelectorales con el PSOE o sobre la legitimidad de la actual dirección nacional.
Sin la fecha aún confirmada para que se celebre la asamblea de la polémica, se barajan los días 3 y 4 de octubre para iniciar el mencionado debate. Una vez más, Málaga sirve de ejemplo para poner de relieve las diferentes corrientes que se han instalado en el seno de Podemos y que se debaten entre la lealtad hacia la dirección nacional y la vuelta hacia los orígenes de la formación.
