Una vez más, el collar salió más caro que el perro; el remedio fue peor que la enfermedad. Fueron las frases que más repitieron a La Opinión los trabajadores del Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) que ayer quisieron hacer una valoración de la prueba piloto que durante la pasada semana impulsó la propia tecnópolis en colaboración con la Dirección General de Tráfico.
En concreto, el ensayo consistió en la reordenación de la entrada al PTA a través de la regulación de la glorieta Plácido Fernández Viagas, lo que causó importantes atascos en las horas de mayor tránsito de vehículos (antes de las 9.30 y a partir de las 19 horas). La situación más caótica se produjo a causa del tráfico proveniente de Santa Rosalía-Maqueda y Campanillas, que no tenía prioridad de entrada en la rotonda de acceso al PTA, ya que se favorecía al tráfico que generaba el Parque Tecnológico. A la misma vez, se implantó un carril BUS-TAXI-VAO (para ocupación de dos o más personas) con la intención de favorecer que los trabajadores utilicen medios de transporte alternativos al coche para acudir a su lugar de trabajo. Todo ello dentro de la programación que el Ayuntamiento de Málaga preparó con motivo de la Semana Europea de la Movilidad, que arrancó el pasado 16 de septiembre.
El objetivo de esta prueba piloto no era otro que mejorar la movilidad en el entorno del PTA, aunque sus resultados no parecen haber satisfecho a las partes implicadas. «Esto ha sido un caos, más de lo que normalmente es», explicó un empleado de las instalaciones. En la misma línea se mostró Adolfo, un trabajador que asegura que le es «imposible» no coger el coche para ir a trabajar al PTA residiendo en la otra punta de la ciudad. «Yo suelo venir en autobús, pero tengo que venirme media hora antes para no pillar atascos», expresó Antonio.
En relación al autobús, muchos de los trabajadores reclamaron una mejora de los servicios de la EMT, ya que «pasan con muy poca frecuencia» y además «tardan mucho en conectar con la parada principal». En efecto, el tiempo medio estimado para llegar al PTA desde la Alameda Principal es de 35 minutos (teniendo en cuenta tanto la línea 19 como la 25). «Si quieren que utilicemos el autobús, deberían implantar muchas mejoras para que nos sea rentable en dinero y tiempo», comenta Ana.
Otra de las soluciones que propusieron con más interés los ciudadanos encuestados por este periódico fue la creación de una línea de metro que llegue a la tecnópolis y descongestione gran parte del tráfico que se produce. «Sería la solución ideal, aunque no tiene pinta de que la vayan a acometer», declara con indignación Juan Luis.
Por su parte, la concejala de Movilidad, Elvira Maeso, transmitió una valoración positiva, aunque reconoció tras el primer día de la prueba que las medidas aplicadas no habían funcionado del todo bien «porque mucha gente no sabía lo que pasaba».
Sea como fuere, lo cierto es que en el PTA conviven más de 15.000 trabajadores a diario, que en porcentajes se traduce entre el 7,04% y el 10,05% de la población ocupada de Málaga. Y a todos les gustaría estar mejor conectados.