Los agentes de calle de la Policía Local de Málaga empezaron a vestir desde la semana pasada los nuevos chalecos de protección personal, con capacidad antibalas y anticuchillo, mejorando la seguridad de los agentes.

Estas nuevas prendas están siendo adquiridas por el Ayuntamiento de Málaga desde el pasado verano, con idea de equipar a los 450 agentes con labores de calle, según explicó el portavoz del equipo de gobierno y concejal de Seguridad, Mario Cortés.

Durante las pasadas semanas se adquirieron los primeros 181 chalecos, con un coste por unidad de 700 euros. Además, está en marcha el contrato de compra de otros 179 chalecos, con un desembolso de 125.000 euros, que se distribuirán antes de final de año, lo que cubrirá al 80% de los agentes desplegados en la calle. Cortés aseguró que para el año próximo está previsto que se complete la adquisición de estas prendas, con la compra de los 90 últimos.

Una de las características de los nuevos chalecos es que se han tomado las medidas a toda la plantilla, de forma que cada chaleco vaya personalizado y ajustado a cada agente, lo que hace que sean más cómodos de llevar.

Estos chalecos son mucho más ligeros que los que se utilizaban hasta ahora, además de ser lavables. La idea es que los agentes que van por la calle puedan llevarlos puestos en cada momento, asegurando un nivel de protección importante. De hecho, incluye características para evitar los navajazos y cuchillazos, un requerimiento que se puso como una prioridad tras el fallecimiento de un agente de la Policía Nacional el pasado año, en mayo, por una puñalada.

Los antiguos chalecos quedarán para los mandos de la Policía Local, que lo llevarán en sus coches para casos de emergencia.