Un hombre de nacionalidad rumana ha sido condenado por la Audiencia Provincial de Málaga a un total de 11 años de prisión por un delito de trata de personas y otro de prostitución coactiva.

También se condena a una mujer, de la misma nacionalidad, a dos años de prisión por ser autora de un delito de prostitución coactiva, según la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe.

La investigación policial se inició tras una denuncia de una mujer, nacida en Mangalia (Rumanía), que ingresó de urgencias en el Hospital Civil de Málaga en junio de 2011 y aseguró haber sido traída de su país por una red mafiosa para ejercer la prostitución.

Tras la investigación policial se detectó a otra mujer, testigo protegida en el juicio, que también vino a España para trabajar como bailarina pero al llegar se le retuvo la documentación y la obligaron a ejercer la prostitución.

El tribunal considera probado que la testigo protegida fue captada para la explotación sexual y que los acusados realizaron labores de apoyo logístico para que la víctima ejerciera la prostitución.