­La propuesta de los grupos de la oposición para que los plenos dejen de ser maratonianos y se desarrollen en dos sesiones diarias no ha terminado de convencer al alcalde, que sin rechazarla de plano sí ha indicado que «habrá que estudiarla como una propuesta más, y a continuación ha puesto sobre la mesa una contraoferta con dos alternativas que vienen a enmendar lo que plantea la oposición: empezar a primera hora, pasando al día anterior todas las actividades previas -junta de portavoces y ruedas de prensa-, o si, finalmente se opta por la división en dos jornadas, que sea en horario de tarde para no afectar a la acción de gobierno y para facilitar su seguimiento por parte de los ciudadanos.

El alcalde sí ha rechazado la otra propuesta de la oposición de rebajar a dos las mociones urgentes que pueda presentar el equipo de gobierno (ahora son cuatro). «No lo veo», dijo Francisco de la Torre, que objetó además que para limitar las mociones habría que modificar el reglamente de pleno.

Respecto a la reunión en sí de la oposición para reforma el pleno, al regidor tampoco le ha gustado que se hiciera sin contar con el equipo de gobierno y dijo que «habría sido bueno» que hubiera participado también el grupo del PP y no sólo la oposición, ya que «estas cosas son buenas hablarlas las cinco grupos con el apoyo técnico del secretario general, que es el que conoce bien el reglamento, cómo se puede interpretar y su adaptación».

Por eso, reprochó que «en la última reunión preparatoria del pasado pleno se quedó en hacer una reunión todos los portavoces para buscar fórmulas para tener horarios más reducidos y no tan largos, sin que fuera necesario pasar a dos días», y advirtió, de todos modos, de que cuando tengamos la propuesta concreta de los otros cuatro grupos, yo no la tengo, el equipo de gobierno podrá tomar posición sobre ella».

En cuanto a sus dos propuestas, una de ellas pasaría por mantener el pleno en un día, pero comenzando a primera hora del jueves. Para ello, la junta de portavoces se celebraría, en lugar de justo antes de la sesión plenaria, en la tarde del miércoles o, en todo caso, al final de la mañana.

De este modo, las mociones urgentes serían conocidas antes y trasladadas a los medios de comunicación también el día anterior. Así, la sesión plenaria podría empezar a primera hora del jueves.