Los desvíos de tráfico en el Centro siguen dando pasos y la semana próxima se empieza a preparar el corte al tráfico del puente de Tetuán y la Alameda para iniciar la obra del metro a finales de este mes. El primer paso en firme se acometerá el martes y el miércoles con el cierre al tráfico de los viales que discurren bajo el puente de Tetuán y paralelos al río: Pasillo Guimbarda, Pasillo de Santo Domingo y la calle Manuel José García Caparrós. Esto permitirá comenzar los trabajos previos a la construcción del túnel bajo el cauce del río y que obligará a suspender la circulación por el puente.

Al cerrar el Pasillo de la Guimbarda, se facilitará con señalización informativa la conexión de la avenida de Fátima con las calles Padre Jorge Lamothe y Cerrojo, en el mismo sentido actual. No obstante, la bajada por Don Juan de Austria y Jaboneros permite una alternativa a la avenida de Fátima, que se quedará sin continuidad poco después del puente de la Aurora.

Estos cortes de tráfico se harán de forma coordinada con la apertura de una alternativa para circular entre el Este y el Oeste del Centro evitando la zona de obras de la Alameda y el puente de Tetuán. Así, a la altura de la plaza de la Marina se habilitará un desvío para el tráfico procedente del Parque para que se dirijan a Muelle de Heredia. La calle del Boquete del Muelle pasará a tener dos carriles en dirección a Muelle de Heredia y uno de subido al Parque, justo al contrario de su diseño actual.

El otro bloque de cambios importantes se producirá en la otra ribera del río, con el puente del Carmen, tras su cambio de sentido de circulación, como alternativa al puente de Tetuán para el tráfico que quiere ir en dirección a La Malagueta. Así, se potencia el desvío de tráfico desde la avenida de Andalucía a la avenida de la Aurora, con idea de que luego continúe por el Pasillo del Matadero (que esta semana se aumentó a tres carriles en sentido al mar) o por el pasaje Linaje, que la semana próxima cambia su configuración para tener todos sus carriles de acceso a la Alameda de Colón.

Además, se aprovechará para restringir la entrada a la Alameda e incentivar así el desvío hacia el litoral. Esto se conseguirá reduciendo a dos carriles la circulación de los coches en la plaza de la Marina en sentido Este (El Palo ), reservando un carril para autobuses y taxis y otro para estacionamiento de taxis y coches de caballos.

La UTE Atarazanas, responsable de construir el tramo del metro bajo la Alameda, tiene prevista una última fase de desvíos de tráfico en la semana del 16 al 20 de noviembre que afectará al sentido Este-Oeste.