Los primeros diez días de noviembre se han consagrado como los más calurosos de la historia en la provincia de Málaga y la tendencia para las próximas jornadas es que continúe así. Habrá que esperar a que llegue el fin de semana para ver algún cambio ya que se esperan cielos nublados y posibilidades de chubascos, según informaron ayer fuentes de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Si la media de temperaturas máximas de los primeros días de noviembre estaba en 21,6 grados, este año esta ratio se ha superado de forma holgada hasta alcanzar el mercurio los 23 grados centígrados. Unos valores más propios de la primavera que del otoño y que dejan temperaturas diurnas por encima de lo habitual, con 14,9 grados de media, frente a los 12,8 grados que marcaba el último récord registrado en la provincia de Málaga.

La diferencia entre los extremos se acorta al comparar la media genérica del mes, que está en 17,2 grados y ha alcanzado este año hasta los 18,9 grados.

La responsable de esta estampa tan poco usual no solo en la provincia, sino en el resto de la península, es una masa cálida que procede del sur y está conectada a las corrientes subtropicales.

Aunque hay posibilidades de que el fin de semana haya que utilizar el paraguas, las predicciones apuntan a que el resto del mes va a seguir con valores por encima de los habituales y la lluvia no será apenas protagonista.