La Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Málaga dieron este miércoles tarde un impulso al tramo del metro en superficie al Hospital Civil, con idea de frenar la fuerte oposición de parte de los vecinos de las calles Eugenio Gross y Blas de Lezo, por donde iría el trazado. Ya han establecido el primer calendario de reuniones con los vecinos, que comenzará el próximo 10 de diciembre por la noche.

La idea del encuentro es destacar las ventajas de este medio de transporte. Pero no se acudirá con las manos vacías, ya que ambas administraciones han optado por desarrollar un diseño que incorpora un carril de vehículos por sentido. Esta alternativa es la menos agresiva con el tráfico privado, con idea de contentar a un sector de los vecinos de Bailén que se sitúa radicalmente en contra del proyecto y rechaza su ejecución.

La alternativa asumida por la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Málaga intenta, de este modo, amoldarse a las preferencias de los vecinos, pero sin renunciar a reducir el tráfico de coches en favor del tranvía, que discurriría por una plataforma central de ocho metros de ancho.

La idea de estas administraciones es avanzar en la redacción del proyecto siguiendo esta alternativa, que además permite ampliar las aceras de Eugenio Gross y Blas de Lezo. De forma paralela, se mantendrán una serie de reuniones con los vecinos que esperan que sirvan para convencerles de sus ventajas.

La reunión celebrada ayer tarde contó con la presencia de representantes de la concesionaria, Metro de Málaga; el delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo, y el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre. Las tres partes coordinaron sus mensajes de cara al próximo encuentro con los vecinos, en la línea de respetar el acuerdo de noviembre de 2013 que contempla llevar el metro en superficie hasta el Hospital Civil.

De la Torre insistió en la necesidad de avanzar en el diálogo con los vecinos, aunque recordó que la Junta de Andalucía «no ha aprovechado el tiempo desde 2013» para explicar el proyecto.

La reunión prevista el 10 de diciembre servirá para dar a conocer «cómo mejorará la calle con la reurbanización» y explicar las ventajas de este medio de transporte, ofreciendo «soluciones prácticas a los problemas que nos puedan plantear».

Sobre la posibilidad de destinar los 41 millones en los que está presupuestada esta obra a otras actuaciones, De la Torre dio un paso atrás y subrayó las dificultades que supondría «por el retraso que obligan los trámites administrativos», como puso de relieve la concesionaria.

También matizó mucho la propuesta de renunciar al tramo al Civil y, a cambio, extender el metro al PTA. En este sentido, recalcó que la concesionaria «cree interesante esta extensión, pero como algo complementario a lo ya planteado, no sustitutivo».

El delegado del Gobierno andaluz destacó la importancia de la regeneración del trazado urbano que supone el tranvía y la mejora de la movilidad, ya que permitirá «que el mismo tren lleve a los viajeros desde el Civil a la Universidad, o a la Alameda o al Martín Carpena». Además, apuntó la posibilidad de organizar viajes a otras ciudades españolas con los vecinos para que conozcan el funcionamiento del tranvía.