Esta navidad se presenta como la más prometedora para comerciantes y hosteleros desde que comenzara la crisis. Tanto insistir en «animar el consumo» ha surtido efecto, los mensajes optimistas han calado en los malagueños y el repunte del gasto comienza a ser real. La campaña llega como agua de mayo tras un otoño de escasas lluvias y el sector confía en que la facturación alcance el 10%.

Las expectativas son optimistas y se nota «cierta alegría» en los clientes. «La tendencia de este año está siendo volver a reservar cenas de amigos -últimamente inexistentes-, aumentar las de empresa y ver mucho movimiento», explica José Porras, presidente de la Asociación de Restauradores malagueños Amares.

Sin embargo, asegura que los resultados siguen siendo inferiores a los obtenidos antes de que comenzara la crisis y que este crecimiento es solo un repunte natural por los malos datos de años anteriores. Es cierto, indica, que «la noche del alumbrado fue apoteósica», el encendido navideño se ha convertido en una tradición más, que se consolida como preámbulo de la campaña y que cada vez genera más ingresos.

Asimismo, el puente de la Inmaculada supone otra fuerte inyección para los empresarios que ven en las buenas condiciones meteorológicas un aliciente extra para sus cuentas. «Málaga es una ciudad de calle, y poder tomarse algo en una terraza anima mucho a la gente», sostiene Porras. En cuanto a los contratos, la asociación explica que cada establecimiento tiene previsto emplear a un mínimo de dos personas durante los 20 días que aproximadamente dura la Navidad, «desde este fin de semana hasta después de Reyes».

El crecimiento que prevé la Asociación de Hosteleros Mahos es más optimista si cabe, y se acerca al 15%. Pero la preocupación ante los últimos acontecimientos en algunos locales, en los que denuncian el desalojo de terrazas por el incumplimiento de la normativa, hacen que «se vuelvan a replantar las previsiones». Su presidente, Jesús Sánchez, cuenta que «las dudas e indignación de gran parte de los empresarios de Teatinos y el Centro» supone que las estimaciones «se mantengan en el aire, a la espera de ver como se van desarrollando los hechos». Algo que puede afectar directamente a las contrataciones por el miedo a las multas.

Aún así, reconoce que ya hay muchas comidas reservadas, incluso más que el año pasado, en las que el gasto medio por persona suele rondar los 25 ó 30 euros.

Explica también que estos días festivos suponen uno de los tres principales pilares en la economía de los bares, puesto que los beneficios de la campaña ayudan a afrontar los meses posteriores, porque, según comenta, hasta la Semana Santa -otro de los momentos cumbre- «la facturación es pésima».

Por su parte, Enrique Gil, presidente de la Federación de Comercio de Málaga, afirma que más del 75% de los negocios esperan «una buena Navidad» que, dependiendo de la zona, ingresa en esta temporada entre el 25 y el 50 por ciento de su facturación anual. Estos datos, resultado de las encuestas previas que la federación realiza habitualmente en el inicio de la campaña, reflejan un crecimiento significativo de hasta el 10%, situándose por encima del año pasado cuando aumentó en un 5%. En el apartado de productos más demandados, las nuevas tecnologías siguen ganando terreno año tras año y ocupan el segundo puesto, dejando el primer escalafón a los artículos textiles.

En general, calculan que el tique medio oscilará en torno a los 50 € y descartan una subida de precios, en favor de «otras experiencias como el Black Friday».

En la provincia, aseguran que la cuantía más alta se produce, con diferencia, en Marbella y que, a pesar de las buenas expectativas, apenas se van a aumentar las plantillas en el pequeño y mediano comercio malagueño.

En la misma linea, se encuentra el estudio que difunde anualmente Deloitte sobre consumo navideño, que estima un gasto medio de 684 € por cada hogar español. La mayor partida se destina a la adquisición de regalos, en concreto, 262 euros por hogar, lo que supone un 12% más que en el mismo periodo del año pasado. Los juguetes continúan siendo el regalo estrella, tanto que el 40% de los 82 € que de media invierte un español en su compra, se concentra en el mes de diciembre, según el estudio Fintonic 2015. Le siguen otros clásicos como ropa, calzados y complementos, libros, perfumes o videojuegos.

En lo que se refiere a los alimentos, el gasto medio se encuentra sobre los 208 euros y el resto se destina a ocio, una categoría que se recupera notablemente y en la que los viajes vuelven a tener un papel relevante, entre otros.

También aumenta el desembolso en lotería de Navidad, y es que se estima que cada español dedicará una media de 62,72 euros, 1,22 euros más que en 2014.

@aidagar