El Juzgado de lo Penal número 9 de Málaga tiene previsto juzgar este miércoles a cuatro hombres, acusados de robar en 2010 la estructura de la tribuna de Semana Santa de la capital, que estaba depositada en unas instalaciones municipales, con el fin de venderla como chatarra.

La Fiscalía malagueña solicita dos años y tres meses de prisión para cada uno de los acusados; mientras que la acusación particular, en representación de la Agrupación de Cofradías, pide tres años de cárcel, según las conclusiones provisionales de las partes.

Los hechos sucedieron el 11 de septiembre de 2010. Según las conclusiones iniciales del ministerio fiscal, los acusados se pusieron de acuerdo y, según un plan preconcebido, acudieron a unas instalaciones de los Servicios Operativos Municipales para apoderarse de dicha estructura.

La finalidad era vender las piezas metálicas como chatarra, dice la Fiscalía, que sostiene que aprovecharon un momento en que en esas dependencias municipales se estaban realizando unas obras y habían suprimido una parte de la tapia que circundaba las instalaciones.

Los procesados, indican las acusaciones en sus escritos iniciales, a los que ha tenido acceso Europa Press, fueron al lugar con tres camiones --uno de ellos grúa--, conducidos por los procesados, y que fueron previamente contratados por uno de ellos.

Así, las acusaciones indican que los procesados "se apoderaron de pasarelas y estructuras de hierro de dicha tribuna", que cargaron en los camiones y "procedieron a la venta de las piezas", que pesaron 16 toneladas, en una chatarrería por un precio de 3.564 euros.

El material sustraído fue intervenido en las instalaciones de dicha empresa, pero, según un informe pericial, resultó deteriorado y no es posible volver a utilizarlo, por lo que ha sido tasado como chatarra por una cantidad de 3.888 euros.

Esa estructura era propiedad de la Agrupación de Cofradías, que pagó 207.700 euros en 2003, por lo que la entidad ha resultado perjudicada, al haber tenido que reconstruirla, para lo que ha pagado 91.800 euros. Por esto, piden que indemnicen a la institución con esta cantidad.

Para las acusaciones, se trata de un delito de hurto agravado por perjuicio de especial consideración, solicitando el fiscal que se imponga a cada acusado dos años y tres meses de prisión, mientras que la Agrupación de Cofradías pide que se les condene a tres años de cárcel.