El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Málaga se encuentra paralizado y con todas las incertidumbres posibles después de la fallida convocatoria para buscar candidatos a dirigir los distritos, dado que sólo cuenta con 7 aspirantes para dirigir nueve distritos y algunos de ellos con un perfil político y partidista muy marcado que podría impedir su nombramientos que está en manos del alcalde ya que se trata de personal eventual.

El portavoz del equipo de gobierno en el Ayuntamiento, Mario Cortés, reconoció ayer las dificultades y aventuró que puede que el 1 de enero los distritos no puedan contar aún con sus nuevos directores, indicando que «será complejo» contar para el 1 de enero con empleados públicos que sustituyan a los actuales directores de distrito.

Por ello, el alcalde, Francisco de la Torre, y el portavoz de C’s, Juan Cassá, tendrán que determinar si se prorroga a los actuales o si directamente se dejan sin ocupar estos cargos hasta contar con los sustitutos.

Tras las elecciones se prevé que se sienten a negociar para revisar la petición firmada en el acuerdo de investidura de que los directores de distrito sean empleados públicos y el proceso de elección abierto por el gobierno local.

Tal y como especificó, aparte de que el periodo navideño dificulta el desarrollo de cualquier proceso administrativo, un cambio de las bases ya invalidaría la elección actual y obligaría a convocar un nuevo procedimiento. Además, Cortés dejó claro que «si se dice que no quieren cargos políticos en los distritos e invalidamos a cargos del PP, habrá que invalidar también del resto de formaciones».

Cortes dijo que se contempla la posibilidad de incrementar las retribuciones -39.000 euros brutos como personal eventual en régimen de dedicación exclusiva-, de modo que se haga el cargo más atractivo entre los funcionarios.

También existe la posibilidad de disminuir los requisitos, lo que, de todos modos, el edil del PP no considera «lógico», teniendo en cuenta que «son puestos directivos que necesitan una mínima formación».

Cortés reconoció que el problema radica en que «entre los empleados públicos del Ayuntamiento no hay mucho interés porque las condiciones por convenio de un funcionario, con dietas, días de asuntos propios, horas extras..., son mejores que las del personal eventual que es un director de distrito».

Pese a ello, insistió en que «se debe ver cómo cumplir el pacto de investidura, nombrando a directores de distrito que sean empleados públicos, pero garantizando que no se nos disparen los costes».