Con el nuevo año, llegan también las buenas intenciones, y aunque la mayoría se queden solo en eso, comienzan los sacrificios alimenticios para perder esos kilos de más, los esfuerzos desmesurados por ponerse en forma y las repentinas ansias por aprender idiomas. Eso sí, nada mejor que una buena dosis de rebajas para afrontar la cuesta de enero. O eso es lo que debieron pensar aquellos que desde las 9 de la mañana esperaban ayer impacientes a que las franquicias y grandes superficies abriesen sus puertas para dar comienzo a las tradicionales rebajas de invierno que se mantendrán en la mayoría de los establecimientos hasta principios del próximo marzo.

Según la Unión de Consumidores Andaluces (UCA) cada malagueño gastará más de 95 euros durante el periodo de rebajas, situándonos por encima de la media andaluza -en torno a los 78 euros-. El textil, seguido por el calzado y los complementos, siguen siendo los sectores en los que más se invierte, sumando un 76,77 por ciento del presupuesto total.

Colas en cajas que contrastan con probadores poco concurridos porque, en estas rebajas, la mayoría de las personas ya van con «ideas fijas». Durante los días anteriores han fichado lo que quieren y ahora van a comprar cosas concretas, según detalló Teresa Fernández, una clienta habitual, aunque reconoció que «después siempre cae algo más». Y es que, al igual que el resto de los consultados, señala que hay más descuentos que otros años, sobre todo en prendas de abrigo por las atípicas temperaturas. Pero también más presupuesto: «Hay más movimiento, más optimismo, yo misma voy a gastar más que en las anteriores». Sin embargo, no todos tienen la misma predisposición y mientras algunos se limitarán a hacer devoluciones de aquellos regalos de Navidad que no se ajustan a lo escrito en la carta a los Reyes, otros esperarán a que los precios vuelvan a bajar en las próximas semanas. Aun así, el consumo se adueñó ayer de muchos bolsillos y la estampa que dejaban las tiendas era inequívoca. Mucha afluencia, bolsas, tarjetas y carteles.

Mejores ofertas. No obstante, la jornada transcurrió con relativa normalidad y las aglomeraciones son cosa del pasado. La flexibilidad que permitió la liberalización en 2012 de los periodos de rebajas ha provocado que grandes y pequeños comercios adelantaran sus descuentos en plena campaña navideña. Una iniciativa a la que se sumaron las ofertas del Black Friday, que muchos aprovecharon como unas auténticas «prerebajas», junto al hecho de que cada vez es mayor el número de personas que realiza sus compras online, hacen que las de invierno sean menos esperadas que en otras ocasiones.

Aun así, para comprobar que la normativa se cumple los inspectores de consumo realizarán más de 75 actuaciones en la ciudad para comprobar si se ha aplicado algún descuento en los productos que se ofrecen, comprobar si son los mismo que estaban a la venta un mes antes del inicio de las rebajas y saber si admiten los mismos medios de pagos.

Durante el 2015 se realizaron más de 350 inspecciones en cerca de 300 comercios y se levantaron 60 actas positivas -incumplimiento­-, el 16 por ciento del total de los comercios.