El grupo cooperativo agroalimentario Dcoop, con sede central en Antequera, ha reforzado su sección de vinos con la incorporación de la cooperativa vitivinícola Unión de Cosecheros de Labastida en Álava (UCL), más conocida como Solagüen, que le permite además el acceso a la región vinícola de La Rioja, según informó ayer la propia firma. Esta bodega de Labastida es la mayor cooperativa vinícola vasca y comercializa vinos con marcas reconocidas como Solagüen y Manuel Quintano, que ahora pasarán a formar parte del portafolio de productos que ofrece Dcoop, que en 2014 ya integró al grupo cooperativo Bodegas Baco de Castilla-La Mancha.

La Unión de Cosecheros de Labastida, fundada en 1965, cuenta con un centenar de viticultores que cultivan unas 400 hectáreas de viñedo, que a su vez producen una media de 2,5 millones de kilos de uva de diferentes variedades como tempranillo, garnacha, viura y malvasía, ubicadas dentro de La Rioja Alavesa y La Rioja Alta, en el marco de la Denominación de Origen Calificada La Rioja.

Dcoop subrayó ayer que tras esta incorporación, Labastida se convierte en punta de lanza en el desarrollo de la sección de vinos del propio grupo en lo referente a la comercialización de vino embotellado. Fuentes del grupo malagueño añadieron que el valor de la operación no reside tanto en la cantidad de vivo que aportará la UCL -Baco tiene producciones de 200 millones de kilos al año- sino al hecho de que se trata de una bodega que «aporta marca, ventas de producto embotellado y que supone la entrada en la Denominación de Origen de La Rioja». La sección de vino de Dcoop, que centra su cosecha en tierras castellanomanchegas, destina parte de su ventas al granel.

Por otro lado, el grupo malagueño explicó que esta operación consolida a la alavesa UCL como un gran referente de vinos de La Rioja Alavesa y fortalece su imagen de marca y su presencia en los mercados internacionales.

«A su vez, esta sinergia actúa como elemento tractor en el sector cooperativo, tanto en el País Vasco como en el resto de España, lo que refuerza el desarrollo del grupo industrial», señaló Dcoop.

La sección de vinos de la cooperativa de origen malagueño tiene su origen en el grupo cooperativo castellano-manchego Baco, que se fusionó en 2014 y cuenta con 13 cooperativas asociadas con producciones del entorno de 200 millones de kilos de uva que recogen sus 8.000 viticultores en 36.000 hectáreas, fundamentalmente en La Mancha, con una facturación superior a 60 millones de euros.