La cadena de distribución Makro y el chef Sergio Garrido, del Hotel Vincci Posada del Patio de Málaga y miembro de Eurotoques, se unieron el pasado viernes para ofrecer un taller a los más pequeños de la casa. Asistieron niños del Hospital Materno Infantil, que acudieron al taller a través de la Asociación de Voluntarios Oncológico Infantil (AVOI), e hijos de los empleados del propio Makro.

El centro Makro de Málaga acogió esta jornada en la que se les enseñó a los asistentes que, pese a la multitud de sabores que tienen los alimentos, todos se deben a la combinación de tan solo cuatro: ácido, amargo, dulce y salado. De forma lúdica y participativa, niños y niñas fueron descubriendo que a la hora de comer no solo son importantes los labios, la lengua o el paladar sino también el gusto, el olfato o el tacto para apreciar las cualidades de los alimentos.

Los pequeños, emulando a los grandes cocineros, se vistieron con delantal y gorro para ver, tocar y manipular los alimentos. En la clase práctica descubrieron, por ejemplo, que el sabor dulce se concentra en la punta de la lengua o que el salado se distribuye por los laterales anteriores y posteriores. Entre todos elaboraron un postre natural, rico y nutritivo. Durante la jornada se insistió en la importancia de seguir una alimentación sana, variada y equilibrada.

"No hay alimentos ni buenos ni malos. Lo que no debemos hacer es comer siempre lo mismo. La comida nos sirve para estar sanos y crecer fuertes y es necesario extraer de cada alimento sus nutrientes y vitaminas", indicó el chef Sergio Garrido.. Al finalizar el taller, los asisentes recibieron un diploma acreditativo de su participación que les fue entregado por Garrido y por Víctor Arcos, director del centro de Makro en Málaga.