El delegado del Gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, aseguró ayer que los resultados que está teniendo hasta ahora la implantación de las comunicaciones digitales en el ámbito judicial desde el pasado 1 de enero apuntan a que, como ya se advirtió desde la Junta de Andalucía, esto «se había hecho de una forma precipitada y sin contar con los implicados».

Ruiz Espejo, que asistió a un acto sobre el punto de mediación judicial de la Ciudad de la Justicia de Málaga, señaló que «se han confirmado las cuestiones que ya adelantó el consejero de Justicia de Andalucía», Emilio de Llera, como es «la precipitación» y que se hizo por el Gobierno «sin contar con las comunidades autónomas y los juzgados y distintos operadores jurídicos».

«Ya advertimos que esto, de forma precipitada, sin presupuesto y con fechas categóricas, sin consultar con los implicados, iba a ser problemático», aseguró el delegado del Gobierno andaluz en declaraciones a los periodistas.

Así, indicó que en lo que respecta a sus competencias «se están intentando solucionar los problemas que se están sucediendo desde el día 1» y explicó que «hay ámbitos en los que ya estaba implantado el sistema Lexnet con anterioridad y que están funcionando bien, porque sabíamos que los programas se habían integrado con nuestro sistema Adriano».

Asimismo, apuntó que había otros órdenes «en los que no se había integrado y se hizo a finales de 2015, que han dado más problemas y no ha resultado de forma satisfactoria», pero incidió en que «se están intentando resolver».

En los últimos días, los sindicatos STAJ y SPJ-USO han criticado duramente los fallos que está teniendo este sistema de comunicación digital que conecta a los abogados y procuradores con los juzgados.

A las críticas sobre la dificultad para enviar las demandas dado que hay que rellenar numerosos campos, se suman las de que no tiene mucha capacidad y los escritos hay que mandarlos incompletos y llevar el resto impreso o en un CD; que no llegan completas o que, directamente, no llegan, así como también se han dado problemas en la firma digital de los jueces. En Marbella, el juez decano dictó un acuerdo alertando a los abogados y procuradores de que llevaran las demandas físicas además de mandarlas por Lexnet, y advirtiendo de un posible desabastecimiento de papel.