­Después de intentar una primera aproximación que está condenada a estrellarse contra la incompatibilidad de los programas, Pascual cree que Sánchez, una vez liberado de la presión de sus barones y de Ciudadanos, estará en disposición de entrar en un pacto múltiple de Gobierno. «Yo discuto con compañeros socialistas y hay un nivel de acuerdo importante», asegura una de las figuras destacadas en Podemos.

¿Podemos de verdad tiene la intención de llegar a un acuerdo con el PSOE?

La intención no puede ser más firme. Por eso la presentamos al jefe de Estado de nuestro país. Se la comunicamos primero a él porque creíamos que era lo que correspondía. Uno no le traslada al Rey su intención de formar un Gobierno de manera tan clara como lo hemos hecho nosotros, si detrás no hay una voluntad real.

Desde fuera da la sensación de que la exigencia de Pablo Iglesias para que Sánchez rompa el diálogo con Ciudadanos antes de sentarse a negociar está bloqueando un verdadero acercamiento.

Nosotros no estamos excluyendo a Ciudadanos del diálogo. Lo que estamos diciendo es que su programa electoral no es progresista. Es un programa escrito por la FAES. Luis Garicano, su principal responsable económico, ha diseñado una serie de medidas tan incompatibles con lo que proponemos nosotros como subir el IVA a determinados productos o el copago sanitario. Sinceramente, después de haberme leído el programa del PSOE, tampoco tiene ningún encaje con lo que quiere Ciudadanos.

Podemos aún ni ha confeccionado un equipo para negociar.

Uno se sienta a negociar cuando hay algo que negociar. Nosotros le hemos planteado al señor Sánchez formar un gobierno para gobernar este país. Cuando nos podamos sentar en una mesa para eso, lo haremos. Nosotros no estamos para escribir cosas en un papel y que luego el viento se lo lleve todo, al igual que ha pasado con las promesas electorales en años anteriores. El PSOE lleva en su documento para negociar que quiere acabar con las puertas giratorias, pero vemos como Trinidad Jiménez se integra de forma definitiva en Telefónica y Elena Salgado entra en el consejo de administración de Pescanova.

En este clima de recelo mutuo, ¿no cree que vamos directamente hacia una nueva convocatoria de elecciones?

De verdad, creo que las posibilidades de ir a unas nuevas elecciones son pocas. Espero que el PSOE atienda la oferta para gobernar a España en una coalición con nosotros cuanto antes. Con sus propuestas programáticas y su rechazo frontal a un gobierno del PP la única posibilidad de que se pueda aunar todo eso, es bajo un gobierno progresista con nosotros.

Pero Pedro Sánchez ha optado primero por explorar las posibilidades con Ciudadanos.

Pedro Sánchez está obligado a teatralizar un posible acuerdo con Ciudadanos para atender a las presiones internas dentro del PSOE. Todos sabemos cuáles son, y éstas le obligan a explorar esa vía. Pero, por esa vía no se va a ningún lado porque Ciudadanos insiste en meter dentro del mismo acuerdo al PP y creo que el propio PSOE ha dejado sobradamente claro que esto no puede ser.

¿El PSOE está más cerca de Podemos que de Ciudadanos?

Yo quiero creer que es así.

¿En qué consisten las propuestas incluidas en la oferta que Podemos le quiere trasladar al PSOE?

A esta pregunta no puedo contestar porque le corresponderá a nuestro secretario general presentarlas.

¿Pero en qué medidas se pondrá el foco?

Para nosotros es prioritario acabar con los desahucios en España, es primordial derogar la reforma laboral y la Ley Mordaza. Una serie de cuestiones que también están encima de la mesa por parte del PSOE. Yo discuto con compañeros socialistas y hay un nivel de acuerdo importante. Lo que falta es que nos pongamos a constituir ese gobierno que pueda ejecutar estas tareas.

¿Puede Podemos prescindir del referéndum en Cataluña? Es una línea roja para Sánchez y ha reiterado en infinitas ocasiones que no la va cruzar.

Sentémonos a hablar de ello. Nosotros tenemos una propuesta encima de la mesa. Ellos han insinuado que tienen una propuesta también. Creo que emerge de una fusión de la propuesta que llevaban en las elecciones catalanas de 2012 y de su acuerdo de Granada. Repito, sentémonos a hablar y veamos.

¿No cree que muchos votantes de Podemos les han votado para impulsar políticas concretas para paliar el drama social que viven muchos españoles y no para resolver debates identitarios?

Seguro. La prioridad de nuestros esfuerzos está en la cuestión social. No le puede caber duda a ningún español. Sería, sin embargo, extremadamente irresponsable no abordar el problema en Cataluña. Eso no significa que el mayor grueso de nuestro esfuerzo esté centrado en sacar adelante políticas sociales.

¿Las confluencias nacionales amenazan con erosionar a su grupo parlamentario?

En absoluto. Han sido fórmulas más que exitosas en términos electorales. Es más, diría que nos hacen más fuertes.

Los conflictos autonómicos se le están amontonando a Podemos. Ahora en Galicia. Como causa, siempre se señala a la falta de autonomía política para tomar decisiones.

Lo único que hacemos en lugares donde hay situaciones de crisis orgánica es aplicar las normas que hemos votado entre todos.

En Málaga, el Consejo Ciudadano actual se encuentra en una situación de transición.

Abordaremos esto cuando se despeje la situación a nivel nacional. Buscaremos las fórmulas para estas situaciones, donde se hayan producido dimisiones como ha sido el caso de Málaga.