Los niños de la crisis son los que se incorporan ahora al sistema educativo. Nacieron en años muy difíciles.Sus efectos dramáticos en los hogares se dejaron notar en un notable descenso de la natalidad. Los matrimonios no se podían permitir el lujo de ampliar la familia. Por eso, de unos cursos a esta parte, esto también se traduce en una importante bajada de las solicitudes para acceder a la escuela. A muchos centros le sobran plazas. Incluso a los concertados con más prestigio, que se han lanzado en una carrera por atraer a las familias para que se decidan por sus centros para echar la matrícula de sus hijos.

La competencia es grande. Los colegios despliegan todos sus recursos de comunicación y marketing para dar a conocer su oferta y proyectos educativos. Durante estos días celebran jornadas de puertas abiertas, una costumbre que viene extendiéndose desde hace un par de años, coincidiendo con este descenso de la natalidad. Así como por la inversión del flujo migratorio.

Sebastián Vílchez, presidente de la cooperativa del colegio Platero, en El Candado, explica que su centro celebra este año las terceras jornadas de puertas abiertas para mostrar a las familias su modelo pedagógico. La harán el próximo 16 de febrero, para Primaria, y el 18 de febrero, para Infantil. «Lo que pretendemos es captar el interés de las familias», explica. A pesar de la limitación que impone la Junta con los criterios de baremación, que dan preferencia a la cercanía del domicilio familiar.

Isabel López, directora titular del colegio El Monte, en la Victoria, insiste en que este tipo de actividades se llevan a cabo para distinguir a cada colegio sobre sus competidores. «Todos tenemos ya bilingüismo, actividades extraescolares, servicios complementarios... En el caso de nuestro centro, lo que destacamos son los conceptos naturaleza y familia. Y gracias a las jornadas de puertas abiertas comprobamos cómo el 90% de los padres que asisten, terminan matriculando a sus hijos en el colegio», explica.

La gran mayoría de los colegios concertados de la capital tenía problemas para poder atender la gran demanda de solicitudes que recibían cada vez que se inicia el proceso de escolarización. La situación ha cambiado completamente, sin embargo. La provincia de Málaga alcanzó en 2008 la cifra más alta de nacimiento de las últimas décadas, con 19.015 niños nacidos. Pero a partir de ahí comenzó una caída de la natalidad, un descenso que se mantuvo los cinco años siguientes, hasta 2014, cuando se produjo en pequeño repunte. Los niños que nacieron en 2013 son los que este próximo curso se incorporarán al sistema educativo como alumnos de Infantil de tres años.

Los colegios concertados sobreviven de los conciertos educativos con la Junta, es decir, prestan un servicio educativo a cambio de una subvención por cada alumnos. Defienden, además, que una plaza en la concertada cuesta la mitad que una en la pública. Jesús Martín Béjar, coordinador de Gestión y Marketing del colegio de los Maristas, sostiene que su centro aún recibe más solicitudes que plazas tiene disponibles, pero también realiza jornadas de puertas abiertas centradas en Bachillerato, etapa que ya no es obligatoria y, por tanto, no es concertada. Se celebró el pasado viernes, a las 16.30 horas.

También la pública. Las jornadas de puertas abiertas no es solo costumbre de la concertada. De hecho, el IES La Rosaleda, por ejemplo, lleva 22 años celebrándolas con el objetivo de dar a conocer la oferta educativa del centro para el próximo curso escolar, sobre todo FP.

Los padres reclaman estas jornadas porque cada vez quieren estar mejor informados.