La Audiencia de Málaga ha condenado a siete años de prisión a un hombre por abusar de la hija de su pareja desde que tenía 11 años. Se le impone, además, la prohibición de acercarse a la víctima a menos de 500 metros o comunicarse con ella 10 años y el pago de 5.000 euros de indemnización.

Según se declara probado en la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, el acusado comenzó en 2005 una relación con una mujer que tenía dos hijas, una de ellas la víctima; conviviendo todos en una localidad de Barcelona, hasta que se trasladaron a un municipio malagueño.

Así, la Sala considera que cuando la niña apenas había cumplido los 11 años, el acusado comenzó a abusar de ella, aprovechando las ocasiones en las que la madre no estaba. "Estos hechos se produjeron en varias ocasiones, prolongándose en el tiempo", señala la resolución.

Incluso, se indica en la sentencia, se produjeron una vez la familia se trasladó a la localidad malagueña y hasta mayo de 2012, cuando la menor se lo contó a su hermana y ambas, a su madre. Por estos hechos, al acusado se le condena por un delito continuado de abusos sexuales.

El Tribunal da "plena credibilidad" a la declaración de la víctima que resultó "totalmente convincente", y apunta que no existía mala relación con su padrastro y "no se ha encontrado razón alguna para que, siendo consciente de las consecuencias de su declaración, lo hiciese de forma espuria".

Asimismo, un informe psicológico avala la versión de la víctima. Por contra, el procesado negó los hechos en el juicio y consideró que "todo era una venganza" por haberse llevado un día el coche. Cuando su pareja le dijo lo que le había contado su hija de los abusos, se le vino "el mundo encima", señaló en la vista oral.