Un informe del Ayuntamiento de Málaga con motivo de la próxima huelga de recogida de basuras convocada por el comité de empresa de Limasa para el próximo martes 1 de marzo considera que en el caso que se prolongará el paro hasta la Semana Santa la situación que se viviría en Málaga se "podría tildar de catastrófica" y advierte, además, que la acumulación de basuras "incrementaría notablemente la crispación social".
El objetivo del informe, elaborado a partir de los documentos solicitados al área de Turismo, Policía Local, Promoción Empresarial y de Medio Ambiente, es establecer los servicios mínimos que el Ayuntamiento de Málaga pedirá para hacer frente a la huelga, considera que los efectos en la ciudad serán de "máximo impacto" desde el primer día al haberse convocado justo después de un largo puente festivo con motivo del día de Andalucía.
En este sentido el Ayuntamiento de Málaga ha pedido que los servicios mínimos en la recogida de residuos sólidos urbanos sean del 100 % en el Centro Histórico durante la Semana Santa, en los centros sanitarios, mercados de abastos y mataderos; también del 100 % en la recogida domiciliaria en el Centro Histórico en las zonas afectadas por los recorridos procesionales e infraestructuras turísticas, mientras que solicita una recogida en el resto de la ciudad del 65% en el periodo comprendido entre el 1 y 19 de marzo y del 85% de los servicios diarios durante la Semana Santa.
En cuanto a limpieza viaria, el Ayuntamiento reclama unos servicios del 100 % en las zonas afectadas por los recorridos procesionales y del 65% u 85% en el resto de la ciudad.
El informe elaborado por el Ayuntamiento considera que la huelga afectará a la imagen de Málaga como ciudad turística y que el sector de la hostelería se verá muy afectado. Según datos aportados por el área de Turismo, en esta Semana Santa se alojarán en la ciudad unos 52.000 turistas aunque se espera unos 365.108 visitantes durante estos días, de los que más de cinco mil será turistas que desembarcarán en los cinco cruceros previstos.
Además del impacto negativo en la imagen de la ciudad, el informe de la Policía Local expone que la experiencia de anteriores conflictos con la huelga de Limasa refleja que la acumulación de basuras "incrementa notablemente la crispación social, produciéndose notable aumento de altercados y de acciones vandálicas como incendios de contenedores y basuras".
