La Audiencia de Málaga ha condenado a un hombre a un año de prisión por estafar la cantidad de 90.000 euros a otro, al que engañó con una supuesta concesión para un aprovechamiento cinegético y con arrendamientos de cotos de caza. Además, se le condena a una multa por amenazarle con una pistola inutilizada para disparar.

Los hechos sucedieron en 2006. El acusado, según la sentencia a la que ha tenido acceso Europa Press, dijo al perjudicado, con el que previamente había tenido relaciones comerciales relacionadas con la caza, que iba a conseguir el aprovechamiento cinegético de unos terrenos dependientes de la Cuenca Mediterránea en Málaga.

Así, le exhibió la solicitud de la citada concesión y consiguió venderle a cambio de 30.000 euros ese supuesto aprovechamiento, suscribiendo un contrato en febrero de dicho año, según se recoge en el apartado de hechos probados de la resolución de la Audiencia.

Asimismo, tras simular los planes técnicos de dos cotos, de los que era titular una sociedad de cazadores, el acusado convenció al mismo perjudicado para que los arrendara a cambio de 60.000 euros, llevándole en mayo de dicho año un contrato supuestamente firmado por el representante de dicha propiedad.

Meses más tarde, intentó hacer lo mismo con otros dos cotos, para lo que quedaron en la estación de la pedanía de Bobadilla, en la localidad malagueña de Antequera. Pero, el acusado le llevó hasta un cortijo y, "tras sacar una pistola inutilizada para disparar y decirles que toda la documentación era falsa", abandonó el lugar.

Por estos hechos, se le condena por un delito de estafa en concurso con otro de falsedad, ambos con carácter continuado y con la circunstancia que atenúa la pena de dilaciones indebidas, imponiéndole un año de prisión y el pago de una multa en la cantidad de 1.080 euros.

Asimismo, se le condena por una falta de amenazas a pagar 120 euros; y se le impone como indemnización dar la cantidad de 90.000 euros al perjudicado, concediéndole un plazo para abonarlo. La sentencia se dicta con la conformidad del acusado y de su defensa con la acusación definitiva que planteó el fiscal.