Limasa ha presentado un escrito en la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Málaga para que inste al comité de huelga a cumplir los servicios mínimos, que a criterio de la empresa "están siendo incumplidos deliberadamente".

En dicho escrito presentado, se exponen los "retrasos deliberados" que están sufriendo los servicios mínimos desde el comienzo de la huelga, debido, apuntan, "al exceso de celo por parte de los delegados de prevención y comité de empresa".

Asimismo, señalan que "ninguna de las incidencias destacadas en los vehículos supone en absoluto riego inminente para la seguridad de los trabajadores". También se indica que, tras la asignación de los servicios mínimos, los delegados de prevención "paran a todos los vehículos antes de salir de las instalaciones, realizando una inspección exhaustiva".

A juicio de la empresa, esta revisión "llevada al extremo" está provocando "una caravana en las puertas de los talleres de los Ruices", lo que supone "una carga de trabajo considerable en poco espacio de tiempo inasumible por los servicios mínimos del taller que suma en el tiempo total del retraso de los servicios".

De igual modo, añaden en el escrito, "genera un retraso de una media de dos horas del servicio, que coincide con la hora de parada para el descanso de los trabajadores, que es de 25 minutos, elevándose el retraso de dos horas y media hasta tres en algunos casos".

Así, han añadido que este "importante retraso" producido al comienzo de la jornada, también provoca "un impacto negativo en el servicio, disminuyendo considerablemente los rendimientos de las ratios de recogida que no terminan la tarea asignada".

"Al finalizar la jornada, los vehículos se quedan cargados de residuos en las instalaciones, perjudicando directamente al siguiente turno", ya que éste "debe de vaciar en el vertedero el vehículo antes de comenzar el recorrido asignado, acumulando tiempo improductivo al indicado anteriormente en el comienzo de los servicios", señalan.

Por otro lado, han indicado que un mismo vehículo llega a inspeccionarse por parte de los delegados de prevención "hasta tres veces en un mismo día", a pesar de tener la ITV en vigor; por lo que "se evidencia la intencionalidad de retrasar los servicios por parte de los delegados de prevención".

A todas las citadas incidencias, añaden "algunas averías sospechosas" que se detectan en algunos vehículos, como son: "cortes limpios de cables, adhesivos de los asideros retirados, tulipas recién estrenadas rotas o averías fantasmas en la calle".

En el documento, se señala también que "en ningún momento la empresa reniega de revisiones de los vehículos" pero entiende que "se está haciendo un uso abusivo de estos por parte de los delegados de prevención para hacer más acuciante el impacto de la huelga". Además que, la empresa dice que "siempre solventa todas las incidencias que los delegados solicitan".

Por todo ello, Limasa solicita a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Málaga que acuerde instar al comité de huelga para que se acaben "los retrasos deliberados" y "haga cumplir con los servicios mínimos establecidos".

Este sábado suma el quinto día de la huelga de limpieza en Málaga y las partes, que siguen sin encontrar un acuerdo que permita su desconvocatoria, mantendrán una reunión, a partir de las 17.00 horas, en la Casona del Parque.

El principal escollo seguirá siendo la recuperación este año de parte de esa paga de productividad que exigen los trabajadores y a la que el Ayuntamiento no accede, argumentando que el presupuesto municipal de 2016 ya está cerrado, por lo que aplaza su abono a 2017 y 2018.