El vistoso documento, con los escudos de España y el del propio Bernardo de Gálvez, acredita la concesión de una gran medalla al jefe indio Yscalte, de la nación de «los sioux del lago» (la región de los Grandes Lagos, después de que los españoles ocuparan un fuerte inglés, junto a Chicago). Está fechado en 1781 y lo firma Francisco Cruzal, representante del gobernador de La Luisiana Bernardo de Gálvez.
Otro documento es un plano en el que aparece dibujado el famoso Galveztown, el bergantín en el que Gálvez se adentró en solitario en la bahía de Panzacola (en inglés, Pensacola) y derrotó a los ingleses. Son dos de las aportaciones, inéditas hasta ahora, que incorpora el libro Bernardo de Gálvez. Héroe recuperado, escrito por los académicos correspondientes de la Real Academia de la Historia Manuel Olmedo y Francisco Cabrera.
La obra ha sido editada por la Asociación Cultural Bernardo de Gálvez, gracias al Ayuntamiento de Málaga, la Diputación y el Estado Mayor del Ejercito y tiene la particularidad de estar escrita en español e inglés para atender la demanda en Estados Unidos, donde crece el interés por Bernardo de Gálvez, que fue nombrado a finales de 2014 Ciudadano Honorario, una resolución firmada por el presidente Obama. Del libro, que será presentado de momento en Málaga y Madrid, se han editado mil ejemplares.
«La obra pretende dirigirse a todo tipo de público, no a especialistas, quiere ser eminentemente divulgativa», explica Manuel Olmedo, que ha escrito otros libros sobre el estadista.
Bernardo de Gálvez. Héroe recuperado está dividido en tres partes. La primera es una biografía sobre el malagueño de Macharaviaya, figura trascendental en la Guerra de la Independencia de Estados Unidos. La segunda parte detalla «el porqué y el cómo llegó a colgarse en Washington el retrato de Bernardo de Gálvez, en lo que tanto tuvo que ver Teresa Valcarce, nuestra embajadora para Estados Unidos», señala Manolo Olmedo, mientras que la tercera parte está dedicada a los actos celebrados en Málaga en mayo de 2015 en homenaje a Gálvez y que incluyeron el estreno de la cantata al militar malagueño en la Catedral, con la Orquesta Sinfónica Provincial de Málaga y el Coro de la Universidad de Sevilla.
«Hay que insistir en que el libro es bilingüe porque Bernardo de Gálvez aquí en España comienza a ser conocido pero en Estados Unidos lo es desde siempre», subraya Francisco Cabrera. Y como muestra del eco que tiene Gálvez en América, el homenaje que el pasado domingo 28 de febrero le dedicó en Houston, Texas, la Asociación de Granaderos y Damas de Gálvez, cuenta Manuel Olmedo, que señala que en Miami acaba de crearse una fundación de empresarios estadounidenses y españoles con el nombre de Gálvez.
Repercusión en España
La figura de Gálvez en España está teniendo cada vez más relevancia, como demuestra la actual exposición de Bernardo de Gálvez en la Casa de América de Madrid, inaugurada por el Rey Don Felipe en diciembre. Además, ya está en marcha una película sobre Gálvez por el malagueño y académico de San Telmo Carlos Taillefer; se han publicado cinco novelas sobre su figura y está pendiente un cómic. «Me imagino que otras personas han trabajado para dar a conocer la figura de Don Bernardo pero por parte de la asociación creemos que hemos dado un impulso importantísimo», resume Miguel Ángel Gálvez, presidente de la asociación Bernardo de Gálvez.
Además, en Málaga se inaugurará un monumento a los Gálvez que ha realizado Jaime Pimentel y que se instalará en la Explanada de la Estación y se prepara otra escultura, esta vez al padre de Bernardo, Matías de Gálvez, en Tenerife, a la que contribuirá la asociación. También en Tenerife el premio Bernardo de Gálvez Carlos Cólogan prepara unos premios Matías de Gálvez, pues éste vivió varios años en la isla con su familia. La asociación Bernardo de Gálvez prepara a su vez una gran biografía sobre el militar con documentos de archivos de Cuba, Francia, Estados Unidos y archivos españoles «porque nuestro objetivo siempre ha sido el rigor», cuenta Manuel Olmedo. Por último, los coautores y el presidente Miguel Ángel Gálvez quieren agradecer el apoyo constante de Antonio Serrano, decano del Colegio de Ingenieros Técnicos de Málaga, al que desean una pronta recuperación de su enfermedad.
