­ El Ayuntamiento de Málaga ha reducido en 43 millones de euros su endeudamiento en el último año y en 11 millones en el último trimestre, según los datos publicados por el Banco de España y relativos al mes de diciembre de 2015.

Con esa reducción, que en términos relativos es del 6,74 por ciento, Málaga se mantiene como la segunda de las grandes capitales españolas -con población superior a 500.000 habitantes- menos endeudada.

Así lo aseguró el Consistorio en un comunicado, en el que apuntó que el importe de la deuda a fecha 31 de diciembre de 2015 era de 595 millones de euros si se tienen en cuenta los datos relativos a vivienda; en cambio, asciende a 498 millones sin incluir la cantidad correspondiente a vivienda.

A diferencia de lo que ocurre en otras ciudades, el importe de la deuda del Ayuntamiento facilitado por el Banco de España incluye el dinero que el Consistorio pide prestado para la construcción de viviendas de protección oficial con destino a venta y alquiler; «préstamos que en el primero de los casos son asumidos por los adjudicatarios de las VPO, a medida que se finaliza la construcción de éstas».

Además, recordaron que la competencia en materia de vivienda corresponde a la Junta de Andalucía.

La reducción interanual de la deuda acumula ya 12 trimestres consecutivos y recordaron que el nivel de endeudamiento municipal se sitúa por debajo del 110 por ciento máximo fijado por el Gobierno central -en concreto, a 31 de diciembre era de 97,71 por ciento incluyendo vivienda y de 81,71 por ciento sin incluirla-.

Esto, junto con el pago puntual a proveedores y la estabilidad presupuestaria, hace que el Consistorio malagueño «cumpla los principios fundamentales de la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera».

De los datos del Banco de España también se desprende que Málaga, Barcelona y Valencia «son los únicos ayuntamientos de las seis grandes capitales españolas que no tienen suscritos préstamos a corto plazo».

Hacer frente a los pagos. Esto pone de relieve que el Consistorio de la capital malagueña «cuenta con tesorería para hacer frente a sus pagos a corto plazo sin necesitar ayuda externa», ya que, «por ejemplo, el pago a proveedores se ha mantenido en todo momento por debajo del límite legal sin que haya sido necesario acogerse al Fondo para la Financiación de Pago a Proveedores del Gobierno central», informó el Consistorio.­ El Ayuntamiento de Málaga ha reducido en 43 millones de euros su endeudamiento en el último año y en 11 millones en el último trimestre, según los datos publicados por el Banco de España y relativos al mes de diciembre de 2015.

Con esa reducción, que en términos relativos es del 6,74 por ciento, Málaga se mantiene como la segunda de las grandes capitales españolas -con población superior a 500.000 habitantes- menos endeudada.

Así lo aseguró el Consistorio en un comunicado, en el que apuntó que el importe de la deuda a fecha 31 de diciembre de 2015 era de 595 millones de euros si se tienen en cuenta los datos relativos a vivienda; en cambio, asciende a 498 millones sin incluir la cantidad correspondiente a vivienda.

A diferencia de lo que ocurre en otras ciudades, el importe de la deuda del Ayuntamiento facilitado por el Banco de España incluye el dinero que el Consistorio pide prestado para la construcción de viviendas de protección oficial con destino a venta y alquiler; «préstamos que en el primero de los casos son asumidos por los adjudicatarios de las VPO, a medida que se finaliza la construcción de éstas».

Además, recordaron que la competencia en materia de vivienda corresponde a la Junta de Andalucía.

La reducción interanual de la deuda acumula ya 12 trimestres consecutivos y recordaron que el nivel de endeudamiento municipal se sitúa por debajo del 110 por ciento máximo fijado por el Gobierno central -en concreto, a 31 de diciembre era de 97,71 por ciento incluyendo vivienda y de 81,71 por ciento sin incluirla-.

Esto, junto con el pago puntual a proveedores y la estabilidad presupuestaria, hace que el Consistorio malagueño «cumpla los principios fundamentales de la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera».

De los datos del Banco de España también se desprende que Málaga, Barcelona y Valencia «son los únicos ayuntamientos de las seis grandes capitales españolas que no tienen suscritos préstamos a corto plazo».

Hacer frente a los pagos. Esto pone de relieve que el Consistorio de la capital malagueña «cuenta con tesorería para hacer frente a sus pagos a corto plazo sin necesitar ayuda externa», ya que, «por ejemplo, el pago a proveedores se ha mantenido en todo momento por debajo del límite legal sin que haya sido necesario acogerse al Fondo para la Financiación de Pago a Proveedores del Gobierno central», informó el Consistorio.