Los promotores de la construcción de un hotel en el solar donde se levantaba el antiguo palacete del Marqués de Solesio, en la calle Granada, han presentado ya el proyecto básico en la Gerencia de Urbanismo, tal como se comprometieron, a la par que han solicitado la licencia de obras.

En concreto el pasado 4 de marzo la sociedad Azorallom presentó en Urbanismo el proyecto para la rehabilitación del palacete para convertirlo en hotel de cuatro estrellas, con un presupuesto inicial previsto de 4. 569. 484 euros y un plazo de ejecución de 24 meses, según se señala en el expediente que será llevado al consejo rector de la Gerencia de Urbanismo de la próxima semana.

El proyecto básico y la solicitud de licencia se han presentado en el plazo en que los promotores se comprometieron con Urbanismo, que era el hacerlo en un plazo no superior a 60 días naturales desde que se iniciaron los trámite el pasado 8 de enero.

Ese mismo compromiso señala que las obras de construcción se iniciarían en un plazo de cuatro meses a contar desde la expedición del permiso de obras y la presentación del proyecto de ejecución definitivo.

La Gerencia de Urbanismo está ahora tramitando la licencia de obras para lo que está comprobando si el proyecto básico se ajusta a la normativa urbanística, para lo que tiene un plazo de tres meses.

La idea de los promotores es invertir hasta 8 millones de euros en la construcción de un hotel de cuatro estrellas categoría Superior, además de la dotación de mobiliario, con 83 habitaciones y gestionado por una marca hotelera que destaque la singularidad del proyecto y la ubicación.

El futuro establecimiento contaría, según los datos iniciales ofrecidos por la sociedad, con 4.600 metros cuadrados distribuidos en tres plantas, dando acogida a 83 habitaciones, dos restaurantes, un bar, un salón de reuniones y un gimnasio. El inicio de las obras lo prevén para la segunda mitad del año, ya que la previsión es lograr la licencia de obra para el mes de julio, comprometiéndose en iniciar los trabajos en un plazo máximo de cuatro meses.

Los nuevos propietarios adquirieron el edificio a finales del pasado año a sus antiguos dueños, la promotora Salsa Inmobiliaria, que lo tenía abandonado desde hacía varios años.

Precisamente este abandono es lo que llevó a la Gerencia de Urbanismo a incluir la parcela en el Registro Municipal de Solares y Edificaciones Ruinosas, y posteriormente sacarlo a la venta forzosa por método de subasta y por un valor declarado de 2,3 millones de euros como precio de salida.

La compra del inmueble y los compromisos de los nuevos dueños de promover un proyecto para la construcción de un hotel supusieron la paralización de los planes de subasta acordado por Urbanismo.