Álvaro Cuesta es un histórico abogado socialista que ha pasado por muchos sitios: fue concejal del Ayuntamiento de Oviedo, parlamentario durante años por el PSOE y llegó a presidir la Comisión de Justicia del Congreso. Ahora, como vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) es claro y directo a la hora de radiografiar los males de la justicia.

Seguimos siendo un país con pocos jueces...

Tenemos la media más baja de la UE, de 12,5 jueces por cada 100.000 habitantes. En Europa la media es de 15, y tenemos 5.502 jueces y magistrados de los que hay un porcentaje muy alto ya de mujeres, lo cual es un buen síntoma de calidad de la justicia, aunque el número de mujeres en los órganos gubernativos y el Supremo es ínfimo, no se corresponde a la presencia tan fuerte de las mujeres en el resto de la carrera judicial.

La corrupción sigue corroyendo las entrañas del sistema.

La corrupción es una lacra y es la causa de la desafección democrática. Si no acabamos con la corrupción, la corrupción puede acabar con el sistema. Es la alarma más importante de la democracia. El consejo ha puesto en marcha una unidad de actuación para reforzar los juzgados en las grandes causas, UACC. ¿Qué hacemos? Proponer medidas, defender la independencia del juez, quien se vea perturbado en las grandes causas va a tener el apoyo y el ánimo del Consejo, la unidad establece planes de refuerzo, y si un juez necesita más funcionarios instamos a las administraciones para que lo hagan, y establecemos planes de refuerzo: la posibilidad de que los jueces con macrocausas puedan tener apoyo de otros jueces.

¿Cómo afecta a la Justicia que no tengamos Gobierno?

Nos afecta. Con un Gobierno en funciones se bloquea en estos momentos la necesidad de aumentar el número de plazas judiciales y de nuevos órganos judiciales. Tenemos una necesidad de salir del colapso de la jurisdicción Social, y hemos de reforzar la planta. Reforzar los juzgados de primera instancia, mejorar en Mercantil, hay que plantearse la situación de los tribunales superiores de Justicia, que ahora van a tener competencias en la segunda instancia penal, y hacen falta medidas muy concretas de refuerzo tecnológico de los órganos, eso está bloqueado porque no hay un Gobierno. Si hubiera un Gobierno nadie podría usar como excusa que está en funciones.