El tiempo comienza a cambiar a partir de mañana. Una inestabilidad que trae consigo un descenso de las temperaturas acompañado por cielos nubosos con posibles precipitaciones débiles que estarán presentes gran parte del puente de mayo.

Las lluvias de carácter débil alcanzarán la zona occidental y el interior de la península a partir del viernes y persistirán hasta el domingo, aunque no serán de gran calado. Sin embargo, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) detalla que la inestabilidad entra a partir del jueves con los cielos nubosos y temperaturas máximas de 21 grados en la ciudad y la costa. El sábado remontará levemente y habrá máximas de 23 grados. Las mínimas, por el contrario, se mantienen muy elevadas y se moverán en torno a los 18 grados.

El cambio de los próximos días viene propiciado por varias cuestiones, entre ellas, la entrada de una banda de nubes húmedas de origen subtropical y su interacción con una vaguada de la zona norte (aire frío en altura). Asimismo, El próximo lunes, festivo por el Día del Trabajador, los pronósticos apuntan a que la situación habrá mejorado y los cielos estarán despejados.