El concejal de Ordenación del Territorio del Ayuntamiento de Málaga, Francisco Pomares, no se ha andado hoy con indirectas a la hora de situar a cada parte en el conflicto existente entre el Ayuntamiento y la Junta por el proyecto del tranvía al Civil. Pomares, en una reflexión sobre lo ocurrido en la reunión de ayer, ha asegurado que "el Ayuntamiento está defendiendo la voz de la ciudad y que se cumpla la ley", mientras que la "Junta y el PSOE dejan de lado los intereses de la ciudadanía y se venden a los abrazos de los intereses económicos de las multinacionales con las que han firmado el contrato".

Pomares, que hacía referencia a las empresas Construcciones Vera y Comsa y a los cinco fondos de inversión que integran la parte privada de la empresa Metro Málaga, ha insistido en que "mientras que el Ayuntamiento está defendiendo el interés de la ciudadanía y el interés de un proceso legal", la Junta "está defendiendo los intereses de un contrato con una empresa privada y solo aporta miedo, excusas y posibles pleitos".

El concejal, que ha tachado de "chantaje político" la posición de la Junta de responder a "actitudes de otro tiempo", frente al "afán del Ayuntamiento de buscar siempre soluciones", ha advertido que si la parálisis que anuncia la Junta se produce, el Ayuntamiento tiene herramientas legales para que se cumpla la legalidad, "pues el proyecto básico presentado difícilmente cumple con la legalidad vigente y si no nos queda más remedio tendremos que utilizar todas las medidas, incluso las legales, para que se cumpla el interés público de un proyecto y no los intereses privados que están defendiendo la Junta de Andalucía y el PSOE".