­ «Esto es angustioso». Así describe Carmen Manzano, la directora de la Protectora de Plantas y Animales de Málaga, la situación que atraviesa esta asociación. «Nunca en mi vida nos habíamos visto así», comenta preocupada Carmen. Y es que la saturación que vive la protectora no mejora desde hace años y la preocupación aumenta cuando llegan los meses de verano, fecha en la que se producen los números más elevados de animales abandonados.

Para atraer la atención de los malagueños y dar las gracias a las familias que ya han adoptado algún animal en el centro, la Protectora celebró ayer en sus instalaciones una jornada de puertas abiertas. Desde las 11 de la mañana hasta pasada la hora de comer hubo una barra con comida y bebida fría para todo los que asistieron y entre otras actividades se realizó un desfile de los «abueletes», los perros de más edad, una visita guiada y un mercadillo solidario. Carmen Manzano aseguró que la jornada había ido bastante bien y valoró que esta es una oportunidad para que la gente, además, conozca la labor que desarrollan. El balance del día fue de dos cachorros adoptados y otros tres quedaron en reserva. «Así evitan pasar en el refugio más tiempo, lo importante es que vayan rápido de una casa a otra», resaltó.

Con la temporada de verano a punto de comenzar, el problema del aforo en la protectora no mejora y es que 2016 empezó siendo un año pésimo para la asociación con más del 300% de su capacidad llena de animales que han sido abandonados, sobre todo perros. «Esto debería ser problema de las administraciones y ellas son las primeras que no se encargan», lamentó Manzano.

La primavera tampoco ha sido una época fácil. Varios perros enfermaron y pasaron por infecciones: «Tuvimos que recurrir a veterinarios externos de la asociación porque no damos abasto. Especialmente eran cachorros. La gente no los quiere, nos lo dejan aquí, son muy pequeños y enferman. Encima me cuesta un dinero que no debería. Ya no sabemos qué hacer».

¿La solución? Carmen Manzano sigue pensando que lo mejor debería ser legalizar la esterilización «pero parece que no llega». La directora aconseja que si encontramos cualquier animal abandonado en carreteras o en cualquier otro sitio «debe de llevarse inmediatamente al veterinario de 24 horas más cercano. Esto no supone ningún coste y puede salvar la vida de cualquier animal. Si tiene chip será fácil de encontrar al dueño y tenemos que localizarlo, sino debemos intentar llevarlo a una protectora que no esté abarrotada de animales».

Uno de los ejemplares que ha llegado recientemente a la protectora es Barbie, una mastín que es aún un cachorro. «La encontramos atada aun palo en medio de la nada. Sola. Desamparada. Ha estado ingresada en un hospital para animales, esta recuperada y sana, pero da pena verla. Necesita paz y un hogar que la mime y la cuide, Aquí en la protectora con tantos perros, Barbie no encuentra esa tranquilidad», cuenta Carmen. Barbie no tuvo ayer tanta suerte como otros de sus compañeros y sigue a la espera de un hogar.

Para estos meses, la Protectora está tratando de organizar una verbena retro y buscan un local adecuado. Cualquier interesado en ceder un local, puede ponerse en contacto con la asociación.