La vivienda vacacional de costa ha experimentado una llamativa remontada en el último año. Los precios de venta han recuperado tono, al igual que el alquiler, según el portal inmobiliario www.pisos.com. Una vivienda tipo en venta en las playas españolas costaría 179.886 euros, un 11,64% más que en 2015, cuando el precio medio fue de 161.134 euros. En cuanto al alquiler, se ha pasado de una renta media de 527 euros semanales a 565, registrando un incremento del 7,17% en un año.

Los datos de la Costa del Sol reflejan una recuperación de los precios tanto de venta como de alquiler. Si en 2015, el precio medio de una vivienda en Málaga era de 167.086 euros, este año la cifra ha crecido un 15,69% hasta los 193.298. La situación es similar en el alquiler. El precio medio de una semana el pasado ejercicio era de 532 euros; este año, alquilar un apartamento en la Costa del Sol llega a los 608 euros (un 14,29% más).

Si en 2015 tenían que pasar 31 años para amortizar la compra, suponiendo que se disfrutara del piso dos semanas al año y se alquilara a un tercero ocho más, en 2016 se tardarían 32 años en recuperar la inversión, los mismos que en 2014 pero uno menos que en 2013. En cuanto a la rentabilidad por alquilarlo, ha pasado del 2,62% de 2015 al 2,51% de 2016.

Según Miguel Ángel Alemany, director general de pisos.com, la explicación a esta caída de la rentabilidad de un año a otro, si bien mínima, “pone de relieve que los precios han evolucionado de forma más acelerada que las rentas en este último año”. Alemany asegura que “las mensualidades de alquiler quedaron al margen del impacto que tuvo en el mercado el remanente construido por encima del nivel de absorción de la demanda”. Por otro lado, el responsable del portal inmobiliario admite que, “la vivienda vacacional de obra nueva ha estado completamente paralizada en ciertas zonas, lo que ha impulsado los precios de la oferta de segunda mano de calidad hacia arriba en el momento en que han regresado el interés del comprador y la financiación”.

Por otro lado, Alemany también apunta que “los incrementos de dos dígitos deben leerse en el contexto de mínimos del que venimos” en los que “la rigidez hipotecaria atacó más a la segunda residencia y las posteriores campañas comerciales se centraron en el drenaje del stock a base de, incluso, vender a pérdidas”.

Los pisos medios en venta más caros están en Costa Vasca (399.006 €), Costa del Garraf (307.079 €) y Costa Brava (270.970 €), mientras que los más económicos se localizan en Costa de Almería (111.445 €), Costa de Valencia (116.745 €) y Costa Cálida (119.398 €). Respecto a las variaciones frente al año pasado, todas las costas presentan repuntes. Las que más crecen son Baleares (16,83%), Costa de Cantabria (16,70%) y Costa del Maresme (16,44%), mientras que las que menos son Costa de Almería (2,59%), Rías Altas (3,80%) y Costa Vasca (6,24%).

Los litorales de Almería (341 €/semana), Rías Altas (373 €/semana) y Rías Baixas (389 €/semana) son los más asequibles, mientras que Baleares (1.250 €/semana), Costa Brava (932 €/semana) y Costa del Garraf (780 €/semana) son los más costosos. Canarias (15,52%), Costa Blanca (14,95%) y Costa de Valencia (14,82%) son las que más han subido frente al pasado año. Solo tres costas reducen sus rentas: Verde (-11,82%), Azahar (-9,84%) y Rías Altas (-8,13%). Respecto a la rentabilidad, las que más beneficios reportan son Baleares (4,24%), Costa de Valencia (3,56%) y Costa Blanca (3,37%). Costa Vasca (1,24%), Costa de Cantabria (1,94%) y Costa del Garraf (2,03%) son las zonas donde menos se ganaría con el alquiler.