­Un grupo de trabajo formado por enfermería y médicos (entre ellos un jefe Clínico) trabajará a partir de la semana próxima en propuestas de mejora conjuntas. Ese es, según el hospital, el acuerdo al que llegaron ayer en la reunión mantenida entre la dirección médica y de enfermería y los responsables de la UCI.

El encuentro había sido convocado tras la presentación de un documento que recogía más de un centenar de firmas de enfermeras y auxiliares de la UCI del Hospital (lo que supone el 85% de la plantilla efectiva) donde solicitaban la dimisión de los responsables de esta unidad. El motivo al que aludían es «la deprimente realidad de un servicio que presenta, con diferencia, la peor situación de los últimos 30 años» por la falta, «ya crónica», de profesionales de este colectivo.

Asimismo, el centro explicó que la subdirectora de enfermería fue la encargada de transmitir los contenidos y resultados tratados en el encuentro al resto del personal de la UCI.

Sin embargo, el Sindicato Satse, que realizó públicamente la denuncia el pasado miércoles, aseguró a este periódico que «el hospital no cumplió lo prometido puesto que no se reunió con todos los afectados». «No entendemos por qué tienen que decidir quién puede o no asistir a la reunión, decidieron que solo podían ir los cinco primeros de la lista y entre ellos, por ejemplo, no había ningún auxiliar», se quejaba Ignacio Anguita, delegado sindical en el Regional.

Enfermería del hospital lleva meses alertando de «las condiciones sumamente precarias» en las que se trabaja en el servicio, «no solo por la falta de personal, sino por la carencia de recursos materiales básicos, estructuras físicas obsoletas o inexistentes, desorganización asistencial, y descoordinación entre médicos y enfermeros», lamentaba el sindicato Satse.