Cada 24 de junio es ya una estampa habitual el sucio amanecer de las playas de Málaga, después de la celebración hasta bien entrada la madrugada de la noche que da oficiosamente la bienvenida al verano, la Noche de San Juan.

La arena de las playas de Málaga capital ha recibido este viernes cubierta con los restos del naufragio: bolsas, botellas, vasos de plástico, pequeños grupos de jóvenes que aún bien entrada la mañana se resistían a volver a casa, y algún que otro fiestero agonizante que en lugar de intentar recordar el camino al hogar se entrega al sueño, aunque a su alrededor actúen palas y rastrillos. Es el lado oscuro de San Juan, que ha dejado 10,2 toneladas de residuos, recogidas durante toda la mañana por los operarios de Limasa, integrantes del dispositivo especial programado para esta festividad. La cifra es aproximadamente la mitad respecto al volumen que se recogió en 2015, un descenso que ha sido especialmente palpable en las playas de El Palo y la Misericordia.

En el dispositivo de Limasa que ha actuado en las playas ha intervenido tanto el servicio ordinario dedicado a su limpieza en temporada alta, como los medios especiales movilizados para su refuerzo. En total, desde las 5,30h de hoy han trabajado en la limpieza de las playas de la ciudad 177 operarios y 62 vehículos, que, pasadas las 12h, lograron finalizar el trabajo, dejando las playas en buenas condiciones para el uso ciudadano. En el dispositivo de refuerzo han intervenido 135 operarios y 50 vehículos, distribuidos de la siguiente forma: 7 equipos de limpieza mediante brigada, 2 tractores, 24 operarios de refuerzo de limpieza, 26 vehículos auxiliares de barrido, 2 vehículos de recogida con ampliroll, 6 equipos de baldeo mecanizado, 2 equipos de limpieza con hidrolimpiador y otros 2 con minihidrolimpiador, 1 vehículo de recogida mediante cross y 1 recolector nodriza.

Miles de malagueños dieron anoche la bienvenida al verano asomados al mar. Todo el litoral de la Costa del Sol se inundó de reuniones de amigos y espectáculos musicales con motivo de la Noche de San Juan, en la que, como manda la tradición, se llevaron a cabo los distintos rituales para atraer la buena suerte y alejar los malos presagios. Horas antes del anochecer, miles de personas ya ocupaban las principales playas de la ciudad, siendo La Malagueta y La Misericordia las más concurridas. En la primera, tuvieron lugar distintas actuaciones de música latina, por lo que el público joven era el mayoritario. Con la música que ofrecía el Fiestazo, el público tuvo música asegurada de la mano de Dasoul, Nils Van Zanolt, Danny Romero y los DJs MegaStar.