­Con la llegada de julio este fin de semana, la Costa del Sol ha entrado a toda máquina en la temporada alta, el periodo más intenso del año en el que la población puede llegar a cuadriplicarse en algunas zonas del litoral. Sin embargo, la industria turística, además de riqueza, genera una serie de riesgos en los que no cabe la improvisación. De prevención y gestión de emergencias sabe un buen rato Rafael Gálvez, que además de jefe de servicio de Protección Civil es director de Emergencias Andalucía en Málaga.

Julio y agosto. ¿A qué se enfrenta el 112 en la provincia de Málaga durante estos dos meses?

Durante estos meses nos enfrentamos a tres grandes elementos que no se dan tanto durante el resto del año. Por un lado están los incendios forestales, primero con los planes de prevención y después, una vez declarados, con la gestión de los recursos para extinguirlos. También destacan las incidencias que se producen en los entornos dedicados al baño que se extienden por todo el litoral de la Costa del Sol, las piscinas y los pantanos, o las llamadas originadas por los efectos negativos del calor durante los días más cálidos del verano que sufren fundamentalmente ancianos, niños y enfermos crónicos. No podemos olvidar los accidentes en carretera, ya que el tráfico aumenta considerablemente estos meses y esto provoca una mayor demanda.

¿Hasta qué punto se dispara la actividad de la centralita respecto a otras épocas del año?

Es, sin duda, la época del año de más actividad en la Costa del Sol. Sólo entre junio y septiembre del año pasado sumamos 34.301 emergencias gestionadas en la provincia. Por tipología, las asistencias sanitarias fueron las más numerosas, seguidas de asuntos relacionados con la seguridad ciudadana, accidentes de tráfico, los incendios... Durante estos meses también se produce la operación Paso del Estrecho, a cuyos viajeros también ofrecemos nuestros servicios ante cualquier incidencia.

¿Conocen y usan nuestros visitantes el servicio 112?

Por supuesto, diría incluso que lo conocen más. El 112 no es nuevo, está extendido por toda Europa, es el número de emergencias por excelencia y nosotros ofrecemos el servicio, además de en castellano, en inglés, alemán, francés y árabe. Alrededor del 7% del total de las llamadas que recibimos se atienden en uno de estos últimos cuatro idiomas.

La población de la Costa del Sol se multiplica por tres o por cuatro estos meses. ¿Cómo afecta esto a la plantilla del 112?

El aumento de la demanda es evidente durante estas fechas, por lo que lo normal es que la plantilla se refuerce entre un 7 y un 8%. Sin embargo, en eventos tan importantes como la Feria de Málaga, el refuerzo se sitúa entre un 25 y un 30%.

¿Qué papel tiene el 112 en los incendios forestales más allá de la llamada que recibe alertando de la emergencia?

El 112 es por ley el centro coordinador de emergencias a nivel provincial y lo hacemos a través del Centro de Coordinación Operativa, el CECOP. Si un incendio de es de Nivel 0, es decir, si sólo afecta a la masa forestal, toda la información y las llamadas que requiera el operativo serán gestionados por el 112. Cuando el fuego supone un peligro para la población se activa el Nivel 1, que implica la instalación in situ de un puesto avanzado del Infoca en el lugar de la emergencia. Éste estará supervisado por el CECOP y Protección Civil, aunque el 112 seguirá dando soporte al Plan Infoca, y la máxima autoridad pasa a ser el delegado del Gobierno andaluz. En el Nivel 2 entra en juego los recursos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y el Nivel 3, que afortunadamente nunca lo hemos activado, cuando el incendio afecta a más de una provincia.

Hasta la fecha no ha habido incendios importantes.

La mayor conciencia ciudadana permite que la localización de los incendios sea cada vez más precoz y que los planes de emergencia se pongan en marcha antes. Ambos factores han conseguido que todas las incidencias hayan quedado en conatos.

¿Cuáles son las emergencias más difíciles de gestionar?

Cada emergencia tiene características diferentes, pero todas coinciden en que tienen un plan de emergencia específico, un protocolo. Ya sea un incendio, unas inundaciones o un accidente de tráfico grave, en cada caso hay una estructura de mando y otra operativa en la que todo el mundo sabe lo que tiene que hacer. En la provincia de Málaga hemos conseguido un nivel de excelencia gracias a las continuas reuniones de coordinación entre todas las partes que participan en cada tipo de emergencia. Al principio todas son difíciles, pero conforme se va a aplicando el plan de emergencia correspondiente se va haciendo cada vez más fácil.

¿Qué últimas novedades tecnológicas se han incorporado al servicio? ¿En qué consisten?

Llevamos casi un año trabajando con la aplicación my112, una herramienta de consumo interno que está funcionando muy bien. Al principio requirió un gran esfuerzo de formación entre los equipos de coordinación y los operativos, pero actualmente es una plataforma tecnológica muy funcional que nos permite trabajar desde la prevención de una emergencia hasta su planificación. Como herramienta de comunicación es fundamental porque cuenta con una base de datos de todos los recursos disponibles.

¿Cuándo hay que llamar al 112?

Ante cualquier emergencia hay que llamar al 112 por muchas razones. El servicio está disponible para los ciudadanos 24 horas al día, 365 días al año y es multilingüe. Hace años que consiguió la calidad certificada y la valoración de los usuarios es muy elevada gracias al brillante trabajo que los operadores y los técnicos realizan a diario. El 112 es el número de referencia en Málaga y en el resto de Europa.

Llamamos...

Una sola llamada lo resuelve todo. Por ejemplo, en un accidente de tráfico de cierta gravedad, los operadores gestionan el envío de asistencia sanitaria, ponen sobre aviso a la Guardia Civil o a la Policía Local para que se encarguen de la seguridad del tráfico o llaman a los bomberos si se diera el caso de que tuvieran que excarcelar a algún ocupante. Mientras todo eso ocurre, los operativos que participan en la emergencia se mantienen coordinados y comunicados entre sí por la plataforma hasta el final de la emergencia.

¿Hace el malagueño un buen uso del servicio?

Sí. El servicio funciona en la provincia desde 2001, el ciudadano ya conoce perfectamente el servicio y nosotros hacemos por que nos conozcan más con campañas de difusión como la que realizamos con visitas a centros escolares. El uso inadecuado y las bromas de mal gusto son residuales. Los usuarios están muy concienciados.