­Las compraventas de viviendas acumulan un aumento en Málaga del 10,3% en los cinco primeros meses de 2016 en relación al mismo periodo del anterior ejercicio, con un total de 10.984 operaciones, según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La cifra es la mejor registrada en la provincia a estas alturas del año desde 2009, quedando sólo por delante en esta época de crisis las más de 14.600 que se contabilizaban en 2008, justo cuando la actividad comenzaba a percibir los primeros síntomas de parón tras el estallido de la burbuja inmobiliaria.

El año 2016 sigue confirmando así la reactivación del sector inmobiliario aunque las ventas siguen completamente sostenidas por la segunda mano. Mientras, la vivienda nueva tiene cada vez menos peso por la actual escasez de oferta, a espera de que empiecen a llegar al mercado algunas de las nuevas promociones que ya se están empezando a construir. Las cifras, en este sentido, son claras. Hasta mayo, las operaciones de viviendas usadas acaparan en Málaga el 80% del total (casi 8.900) y suben además un 15,5% respecto a 2015. En cambio, las de vivienda de nueva construcción (algo más de 2.100) retroceden un 7,2% sobre las cifras del año anterior.

Esta tendencia, que se viene intensificando en los últimos meses, seguirá vigente hasta que se termina de dar salida al stock de pisos heredado de la época de crisis aunque en el sector todos creen que ese momento está cada vez más próximo.

En España, la compraventa de viviendas subió en mayo el 23,6% respecto al mismo mes del año anterior, hasta las 36.425 operaciones, con lo que este indicador alcanzó la mayor cifra desde enero de 2013, y lo hizo, una vez más, apoyado en el mercado de segunda mano. En el acumulado de los cinco primeros meses del ejercicio, la venta de viviendas creció un 15,8 % y superó las 170.000 operaciones.

Los principales portales inmobiliarios de España valoraron ayer la «buena salud» del mercado ante unas cifras de compraventas «esperanzadoras», pero prevén que éstas se moderarán al venir de unos volúmenes de compraventa mínimos. El jefe de Estudios de Idealista, Fernando Encinar, explicó que los datos están muy relacionados con la mejora en las cifras y las perspectivas de empleo al haber una relación directa por la que «en cuanto mejora el empleo, el cierre de operaciones se incrementa».

El director del gabinete de estudios de Pisos.com, Manuel Gandarias, subrayó que el cambio de año «ha abierto la puerta al registro de incrementos muy esperanzadores para el mercado de la vivienda». Igualmente, apuntó que los efectos de la incertidumbre política tras las elecciones de diciembre «han pasado prácticamente desapercibidos».

A esto se suma que el crédito hipotecario continúa su senda de crecimiento, y esto favorece a la compraventa. «La recuperación es inevitable y sigue consolidándose a buen ritmo», añadió.

Para la responsable de Estudios de Fotocasa, Beatriz Toribio, los «buenos» del sector son el reflejo del «proceso de normalización que está viviendo el mercado inmobiliario después de ocho años de crisis en los que no se compraba ni vendía nada».

«El sector está cogiendo fuerza porque hay crédito, mejores perspectivas económicas y los precios se están estabilizando. En líneas generales, todo apunta a que lo peor ha pasado, aunque el comportamiento sigue siendo muy desigual», agregó.