Un total de 3.515 menores se beneficiarán este verano de las ayudas económicas promovidas por el Ayuntamiento de Málaga. Las subvenciones, para familias en riesgo de exclusión social, incluyen la asistencia a un campamento de verano con servicio de comedor y diversas actividades socioeducativas para niños de hasta 12 años. De esta manera, el área de Derechos Sociales refuerza las plazas disponibles, que se han visto reducidas de 1.620 a 515 en el periodo estival.

El concejal Julio Andrade denunció ayer el incumplimiento de una competencia que atañe de forma exclusiva a la Junta de Andalucía: «Para la Junta, 1.790 niños y niñas dejan de tener necesidad de comer en verano». Así, señaló que desde el Ayuntamiento se han visto obligados a cubrir las plazas necesarias en la ciudad para que los más pequeños no salgan perjudicados, porque «no se puede comer bien solo en invierno».

Ruth Sarabia, directora general del área, anunció que el presupuesto destinado a estas ayudas es de 1.038.000 euros y que se pone a disposición de las familias a través de tres vías: la convocatoria de subvenciones de apoyo a familias con menores para actividades educativas y comedor en periodo vacacional, las prestaciones económicas que gestionan los servicios sociales comunitarios y la escuela infantil municipal «Colores de Málaga».

En primer lugar, un total de 1.790 niños podrán beneficiarse de los campamentos de verano impulsados mediante la plataforma «Educa en verano». Para ello, el Ayuntamiento destina 435.000 euros, un 85% más del presupuesto del año pasado, y la cantidad ofrecida a cada familia oscila entre 170 y 280 euros, en función de sus necesidades.

Además, las familias que no dispongan de ingresos podrán optar a unas prestaciones específicas que les ayuden a cubrir las necesidades básicas de alimentación de sus hijos. Las prestaciones, gestionadas por los servicios sociales comunitarios, cuentan con un presupuesto de 588.630 euros y se podrán beneficiar hasta 1.683 niños.

Por último, la escuela infantil municipal «Colores de Málaga» también permanecerá abierta en verano ofreciendo los mismos servicios que durante el curso escolar, donde se incluye desayuno, almuerzo y merienda. El presupuesto para la continuidad de la escuela es de 15.000 euros, disponiendo de 40 plazas para los menores de tres años.

Andrade señaló que las comidas ofrecidas a través de los distintos mecanismos podrán ser modificadas atendiendo a las distintas necesidades de las familias, como las comidas especiales para niños celíacos. Por tanto, todos los menores en riesgo de exclusión social podrán verse beneficiados, independientemente de las circunstancias en las que se encuentren. «Lo que queremos es normalizar la situación de estas familias», subrayó Ruth Sarabia.

Todas las actividades, que ya están en marcha, se desarrollarán hasta el próximo 9 de septiembre. No obstante, las familias que aún no hayan solicitado las ayudas y que no superen los ingresos requeridos pueden acudir en cualquier momento a los centros de servicios sociales para presentar la documentación necesaria y que se les tramite una prestación adecuada a sus necesidades.