El abogado general del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), Paolo Mengozzi, abogó este miércoles por limitar el pago retroactivo de las cláusulas suelo, es decir, que si la cláusula de su hipoteca se declara abusiva, usted no seguiría abonándola desde hoy, pero sólo podría recibir de lo pagado de más retroactivamente lo que abonó desde mayo de 2013, fecha de la sentencia del Tribunal Supremo, y no todo lo que satisfizo a su banco desde la firma del crédito por su casa, que podría ser anterior a esa fecha (2009 o 2010). El letrado afirma que limitar en el tiempo la nulidad de las cláusulas suelo es compatible con el Derecho Comunitario y lo justifica por las repercusiones macroeconómicas. Esta decisión no es vinculante y todo dependerá de la sentencia del tribunal a final de año, aunque en un alto porcentaje de los casos los magistrados siguen al pie de la letra lo dicho por el letrado general.

Alfredo Martínez Muriel, abogado cuyo despacho lleva casi 600 procedimientos de cláusulas suelo, insiste en que esta decisión no es vinculante y afirma que afectará a casi 50.000 familias en Málaga que tienen cláusulas suelo con sus entidades financieras. «Esto significa que el TJUE aboga por devolver lo cobrado sólo a partir de mayo de 2013, que fue lo que dijo el Tribunal Supremo», señala el letrado, pero añade que tampoco modifica tanto la situación, porque de hecho la Audiencia Provincial y los juzgados de lo Mercantil estaban devolviendo a los afectados lo pagado de más a partir de esa fecha, y no desde el inicio de la firma del contrato hipotecario, que es lo que quieren los letrados y las asociaciones de consumidores.

El procedimiento parte de una cuestión prejudicial que hace al TJUE el juez de lo Mercantil de Granada, de forma que España ya dijo que le parecía bien la limitación de la devolución retroactiva, frente a lo que precisó la Comisión Europea, que abogó por que se devolviera todo lo cobrado (nulidad radical de las cláusulas). El abogado general del TJUE apuesta por lo contrario, es decir, limitar la retroactividad a mayo de 2013 y ahora queda la cuestión final a resolver, lo que ocurrirá en la sentencia del órgano de la Unión Europea a finales de año. El caso lo ha llevado personalmente Alfredo Muriel.

«El TJUE lo que dice es que no debe pronunciarse sobre eso, porque no es competente», declara, al tiempo que también se centra en el interés público económico, es decir, los perjuicios que una devolución retroactiva de lo pagado de más puede suponer para la banca española, que tendría que hacer una nueva provisión multimillonaria de fondos tras un complicado rescate.

Si usted firmó su cláusula suelo en mayo de 2013, esto le afectaría de la siguiente forma si hoy se declarara abusiva su cláusula suelo: no debería seguir pagándola -200 o 300 euros al mes- y recibiría lo pagado de más desde mayo de 2013, lo que supondría unos 6.000 o 7.000 euros. Si usted firmó el crédito hipotecario en 2008, 2009 o 2010, sólo recibiría lo pagado de más desde mayo de 2013, fecha de la sentencia vinculante del Supremo, un criterio que, según Martínez, ya aplican las audiencias provinciales y, por tanto, no supone un cambio tan drástico. Para todos aquellos que tienen cláusulas suelo desde 2009 o 2010, el perjuicio es mayor, puesto que en vez de 10.000 o 12.000 euros percibirán 6.000 o 7.000, además de no seguir pagando la cláusula.

Martínez se queja de que las entidades financieras siguen sin quitar las cláusulas suelo y que muchas continúan litigando en los tribunales dado que las audiencias previas por estos casos, por la saturación de los juzgados, se fijan en 2019 y 2020 a estas alturas. Acabarán condenadas a pagar costas e intereses, pero dentro de varios años, por lo que les viene mejor seguir litigando. La decisión, de cualquier forma, no gusta a este abogado, que hubiera preferido que no se limitara la devolución retroactiva de lo pagado de más.

Ángel Yagüe, coordinador del Instituto Andaluz de Estudios Financieros, asegura que aquí ha tenido mucho que ver el orden público económico, es decir, que el escenario de incertidumbre creado por el brexit y el hecho de la mala situación de la banca italiana, sobre la que hay rumores de rescate inminente, unido al difícil momento de los bancos españoles, supondría un impacto de entre 5.000 y 7.600 millones de euros en todo el país, según un informe del Banco de España, aunque Goldman Sachs lo sitúa en 3.500 millones de euros a sumar a lo ya provisionado por nuestras entidades. De cualquier forma, sería un agujero considerable en una tela de araña ya maltrecha por los vaivenes del mercado y la crisis.

Yagüe, incluso, precisa que las entidades financieras han reducido mucho su exposición a las cláusulas ofreciendo a los clientes quitárselas desde ya sin devolver lo pagado de más retroactivamente o con un fijo del 2% o del 3% durante dos años y luego la supresión total.

No hay datos concretos, pero distintos cálculos estiman que entre el 30 y el 40% de las hipotecas suscritas en España incluía el suelo entre sus condiciones, lo que afecta a dos millones de personas que han pagado de media 3.000 euros más al mes.

Este miércoles, los bancos se dispararon en bolsa tras la decisión, que no es vinculante, del tribunal.