­ Las comunidades de propietarios de la provincia de Málaga cerraron el 2015 con un 13% menos de deuda en relación al ejercicio anterior. Según un estudio realizado por el Colegio de Administradores de Fincas de Málaga y Melilla, la deuda estimada ronda los 66 millones de euros, frente a los más de 75 millones de 2014. «Aunque sigue siendo importante la deuda, sí que empieza a tomar una tendencia de bajada. Además, las circunstancias que nos permiten corroborar que esa mejora se está produciendo es que por fin en muchas comunidades de propietarios se están empezando a prestar todos los servicios», apuntó Fernando Pastor, presidente del Colegio Territorial de Administradores de Fincas de Málaga y Melilla.

Este descenso de la deuda de los inmuebles hacia las comunidades de propietarios, de 9,8 millones de euros, permite rebajar la cifra total por debajo de la registrada antes del año 2012, primer año del que se tienen estudios que analicen estos tipos de parámetros.

Desglosando las deudas que se localizan en todas las partes de la provincia, se puede establecer unas claras divisiones. Además, se aprecia que no se han producido apenas variaciones con respecto al año pasado. Los datos, obtenidos por el Colegio de Administradores de Fincas de Málaga y Melilla, apuntan la deuda por las distintas zonas de Málaga: La Costa del Sol Occidental suma el 50% de la deuda, «los municipios con más morosidad acumulada se centran desde Torremolinos hasta el límite de la provincia», estableció Luis Camuña, vicepresidente y tesorero del Colegio Territorial de Administradores de Fincas de Málaga y Melilla.

A esta cifra le sigue Málaga capital, con un 22%, la zona de la Axarquía un 21% y un 7% restante que se reparte por otras zonas de la provincia.

Esta reducción está justificada por el mayor dinamismo del mercado inmobiliario durante el año 2015.

El descenso del 13% del stock de vivienda nueva, según los datos del Ministerio de Fomento, ha permitido que con las operaciones de compra-venta se liquidaran gran parte de las cargas que los inmuebles tenían con la comunidad de propietarios.

No obstante, se observa que esta mejora del estado financiero de las comunidades de propietarios viene producida por un incremento de las transacciones inmobiliarias más que por una mejora de la liquidez de los propietarios.

El vicepresidente indicó que hay una bajada de «morosos profesionales», que suponen el 46% del total. Este tipo de morosidad está constituido por aquellos tipos de personas que mantiene deliberadamente una situación de deuda hasta que se propicia la venta del inmueble. Además, pese a que la situación está mejorando, insiste en que es necesario afrontar definitivamente una renovación de la Ley de Propiedad Horizontal que agilice los pagos de las cuotas de la comunidad y garantice el cobro a largo plazo.

«Desde el consejo general estamos impulsando, no una modificación de la ley, sino una nueva porque desde que se puso en vigor la Ley de Propiedad Horizontal lo que se viene haciendo es poner parchecitos», reclamó Fernando Pastor.

La mejora en la situación con los bancos también ha influido directamente a este descenso de la deuda.

La bajada de la morosidad en las comunidades de propietarios tiene una base importante en la deuda total que los bancos mantienen y han mantenido, en algunas ocasiones durante años, con las distintas comunidades.

La cuantía que las entidades financieras debían, por las viviendas que tenían en propiedad, ascendió a más de trece millones de euros en 2015, un 23% menos que hace un año; y un 21% del total de la deuda, cuando en 2014 era del 25% del cómputo global. La compra de los inmuebles ha propiciado que los bancos, finalmente, hayan concedido el pago.