­ Las donaciones de órganos en Málaga han aumentado un 59% durante los primeros seis meses del año permitiendo realizar, durante este periodo, un total de 121 trasplantes y situando a la provincia, una vez más, «en una cifra histórica de solidaridad» al registrar hasta 32 trasplantes más que en 2015. Una cifra muy superior a la andaluza donde el incremento fue del 26%, según el balance del Programa de Donación y Trasplantes de Órganos y Tejidos, presentado en la mañana de ayer por el delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo y la delegada territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Ana Isabel González.

En concreto, las 59 donaciones que han tenido lugar en el primer semestre de 2016, 22 más que el pasado año, han supuesto que en los hospitales de la provincia se hayan podido realizar hasta 121 trasplantes, de los que 91 fueron de riñón (el 75% del total y un 55,7% más que en la misma fecha del año anterior); 23 de hígado; y 7 de páncreas. Además, se registraron 29 trasplantes de córnea (un 52% más que en el mismo periodo de 2015) y 35 de médula ósea (un 29% superior). En este sentido, los datos del balance aportan que la tasa de donantes por millón de población de médula ósea en Andalucía se mantiene como una de las más altas a nivel nacional, con 5.569 donantes, por encima de la media del conjunto del Sistema Nacional de Salud, con 4.933 donantes.

Entre las causas que podrían estar detrás del aumento figura el hecho de que el 92% de las familias dijo sí a la donación tras el fallecimiento de algún ser querido (en el primer cuatrimestre del año era del 91%). Al mismo tiempo que se experimentó un impulso por parte de nuevos métodos como la donación en asistolia (a corazón parado), que ha posibilitado hasta 16 donaciones a «corazón parado» durante este 2016 (representan ya el 27% de la cifra global y tiene programa en 17 hospitales andaluces); el crecimiento del número de trasplantes de donantes vivos; de renal cruzado, birrenal y hepático en dominó o en la modalidad de split.

Los datos reflejan que, en la comunidad, la tasa interanual de donantes por millón de habitantes es del 43,6%, dos puntos por encima de la media española, algo que para el delegado del Gobierno andaluz «es motivo de orgullo porque un paciente tiene el doble de opciones para beneficiarse de un órgano que en el conjunto de la Unión Europea». Mientras que González destacaba y agradecía «el gran trabajo de todos los sanitarios» y Domingo Daga, Coordinador de Trasplantes del Sector Málaga, insistía también en la importancia de incluir la donación «en la planificación vital para facilitar a los familiares la decisión en un momento complicado» y que , en su opinión, conseguiría reducir aun más el número de respuestas negativas ante el proceso. «Cuando se tiene suficiente información, negarse es imposible. Y tenemos que seguir trabajando para que cada vez sean más los que deciden donar vida», añadía Daga quien recordaba que sólo 30.000, de los ocho millones de andaluces, han presentado oficialmente ante el registro de la Consejería de Salud «su voluntad vital anticipada de donar» llegado el momento.

En cuanto al perfil del donante, ha aumentado considerablemente la edad media de forma progresiva, lo que constituye una dificultad y un reto para los profesionales sanitarios. Así, la edad media ha pasado de 35 años en 1991, a 61 años en el año en curso, y cuyo motivo puede estar relacionado con el descenso de muertes por accidentes de tráfico que, a su vez, habría generado una disminución de las cifras de donantes.