­

La Consejería de Salud de la Junta de Andalucía está realizando durante este verano un seguimiento telefónico a un total de 1.881 pacientes en riesgo dentro del Plan de Prevención de los Efectos de las Temperaturas Excesivas de la provincia de Málaga. En concreto, en total, desde el 1 de mayo hasta el 31 de julio se han realizado 589 llamadas en Málaga.

Este plan se activa cada verano, desde 2004, con el objetivo de prevenir y minimizar las consecuencias que el calor y las altas temperaturas puedan tener sobre la salud de la población, y especialmente la más vulnerable.

Las personas identificadas como población de riesgo son, en su mayoría, mayores de 65 años y pacientes crónicos, que vivan solos o que padezcan alguna patología crónica de alta morbilidad, así com aquellas que tomen un medicamento que pueda influir en la adaptación del organismo al calor-psicotropos, antidepresivos, hipotensores y diuréticos-. También se intensifican las visitas domiciliarias para monitorizar los signos y síntomas relacionadas con el calor, y proporcionar consejos para evitar y controlar los efectos del aumento de las temperaturas. Las personas que trabajan expuestas al sol o los menores de cuatro años y lactantes también forman parte de la población de riesgo.