El sindicato UGT apuntó ayer que Málaga es la segunda provincia española donde el sector servicios engloba a un mayor porcentaje del total de trabajadores ocupados, sólo por detrás de Madrid, y añadió que también presenta la tasa más baja de la península en cuanto a trabajadores en el sector industrial, al situarse en este apartado sólo por delante de Tenerife y de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. A partir de los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), la secretaria de Empleo y Formación de UGT Málaga, Alicia Fernández, indicó que en el número de ocupados de la provincia alcanza las 575.300 personas, de los cuales 491.700 trabajan en el sector servicios, lo que supone un 85,5% del total.

Fernández dijo que este porcentaje ha subido en más de once puntos desde el inicio de la crisis y que actualmente está nueve puntos sobre la media nacional. Málaga se sitúa así como la provincia andaluza con mayor porcentaje de ocupados en el sector servicios y la segunda a nivel nacional tras Madrid (86,9%).

La representante de UGT subrayó que Málaga también destaca por ser la provincia con el porcentaje más bajo de toda la península en ocupados en el sector industrial. Tan sólo 28.100 personas trabajan en este ámbito, lo que representa un 4,9% del total.

Por otro lado, apuntó que aunque el número de ocupados en el último año prácticamente no ha variado, sí cambia ligeramente su distribución por sectores. En el sector servicios disminuye, pasando de 500.800 a 491.700, mientras crece en más de un 13% en la construcción (de 35.100 a 39.800). En el sector industrial sube en 1.000 personas y en el sector agrario en 3.600. Fernández puntualizó que la construcción es, pese al repunte, la actividad más castigada por la crisis, ya que ha pasado de tener el 15% de los ocupados malagueños en 2008 a sólo 6,9% en la actualidad. En cuanto a la agricultura, mantiene una representatividad muy pequeña suponiendo únicamente el 2,7% del total, con 15.600 trabajadores.

«Estos datos suponen una radiografía clara de las características principales de nuestro mercado de trabajo provincial: el sector servicios se caracteriza no solo por ser muy intensivo en mano de obra, sino porque en la actualidad esta generando un tipo de empleo extraordinariamente precario y marcado por la estacionalidad», explicó.

A su juicio, y pese a la evidencia de que se trata de un sector «muy importante» en la generación de riqueza para la provincia, «es inadmisible que prácticamente todo el modelo productivo se base con absoluta exclusividad en él, habida cuenta de las características del empleo que genera».

«Es urgente, por tanto, diversificar el modelo productivo, incentivando otros sectores y ámbitos productivos, especialmente la industria agroalimentaria, nuevas tecnologías y energías renovables, implementando medidas concretas y estimulando la inversión en I+D+i», dijo la sindicalista, que señaló también como «fundamental» una apuesta por la calidad del empleo en el sector servicios.

El sindicato UGT apuntó ayer que Málaga es la segunda provincia española donde el sector servicios engloba a un mayor porcentaje del total de trabajadores ocupados, sólo por detrás de Madrid, y añadió que también presenta la tasa más baja de la península en cuanto a trabajadores en el sector industrial, al situarse en este apartado sólo por delante de Tenerife y de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. A partir de los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), la secretaria de Empleo y Formación de UGT Málaga, Alicia Fernández, indicó que en el número de ocupados de la provincia alcanza las 575.300 personas, de los cuales 491.700 trabajan en el sector servicios, lo que supone un 85,5% del total.

Fernández dijo que este porcentaje ha subido en más de once puntos desde el inicio de la crisis y que actualmente está nueve puntos sobre la media nacional. Málaga se sitúa así como la provincia andaluza con mayor porcentaje de ocupados en el sector servicios y la segunda a nivel nacional tras Madrid (86,9%).

La representante de UGT subrayó que Málaga también destaca por ser la provincia con el porcentaje más bajo de toda la península en ocupados en el sector industrial. Tan sólo 28.100 personas trabajan en este ámbito, lo que representa un 4,9% del total.

Por otro lado, apuntó que aunque el número de ocupados en el último año prácticamente no ha variado, sí cambia ligeramente su distribución por sectores. En el sector servicios disminuye, pasando de 500.800 a 491.700, mientras crece en más de un 13% en la construcción (de 35.100 a 39.800). En el sector industrial sube en 1.000 personas y en el sector agrario en 3.600. Fernández puntualizó que la construcción es, pese al repunte, la actividad más castigada por la crisis, ya que ha pasado de tener el 15% de los ocupados malagueños en 2008 a sólo 6,9% en la actualidad. En cuanto a la agricultura, mantiene una representatividad muy pequeña suponiendo únicamente el 2,7% del total, con 15.600 trabajadores.

Necesidad de diversificar

«Estos datos suponen una radiografía clara de las características principales de nuestro mercado de trabajo provincial: el sector servicios se caracteriza no solo por ser muy intensivo en mano de obra, sino porque en la actualidad esta generando un tipo de empleo extraordinariamente precario y marcado por la estacionalidad», explicó.

A su juicio, y pese a la evidencia de que se trata de un sector «muy importante» en la generación de riqueza para la provincia, «es inadmisible que prácticamente todo el modelo productivo se base con absoluta exclusividad en él, habida cuenta de las características del empleo que genera».

«Es urgente, por tanto, diversificar el modelo productivo, incentivando otros sectores y ámbitos productivos, especialmente la industria agroalimentaria, nuevas tecnologías y energías renovables, implementando medidas concretas y estimulando la inversión en I+D+i», dijo la sindicalista, que señaló también como «fundamental» una apuesta por la calidad del empleo en el sector servicios.