El director general de Prevención y Calidad Ambiental de la Junta de Andalucía, Fernando Martínez Vidal, espera que se pueda encontrar una solución "consensuada" para los chiringuitos a inicios de este otoño, por lo que apuesta por ser "cautos" y ha cifrado en 24 los afectados en la provincia de Málaga, junto a otros 14 en la provincia de Cádiz, concentrados en el municipio de Chipiona.

En declaraciones a Europa Press, Martínez Vidal ha aludido a la reunión mantenida el pasado miércoles entre la Junta y la Asociación de Empresarios de Establecimientos de Playas de Andalucía (Faeplaya), que ha calificado de "reunión técnica", tras la que "es necesario esperar a los informes de los servicios jurídicos de la Consejería para hallar una solución".

En ese sentido, ha explicado que las partes están "buscando soluciones que nos hagan caminar sobre seguro", de manera que "hay que ser cautos".

Ha recordado que esta situación "obedece la sentencia del Tribunal Supremo (TS) que tumba un artículo del Reglamento de Costas que hace referencia a los establecimientos de playas, algo a lo que "nosotros somos ajenos", toda vez que "ni siquiera el Gobierno comunicó nada a Andalucía, a pesar de tener transferidas las competencias sobre el litoral, acerca de la existencia del recurso".

De esta forma, lamenta que la Junta "no ha podido tener plan B por si la sentencia prosperaba, como sí ha ocurrido, pues esa sentencia tumba un aspecto del procedimiento".

Ante esta situación, la Junta quiere "dar sobre seguro los siguientes pasos que se vayan a dar, intentar no correr riesgos, para que cuando acabe el proceso el sector tenga estabilidad en ese sentido; queremos avanzar sobre seguro, por lo que debemos ser cautos, en garantía del propio sector".

Este portavoz ha negado que haya lentitud en el procedimiento de autorizacion y apunta que "íbamos para adelante pero ahora nos encontramos con una circunstancia desagradable con esta sentencia".

Tras indicar que se debe partir de que hay tres provincias costeras no afectadas y sin expedientes afectados, como Almería, Huelva o Sevilla, ha precisado que la solución que se pueda arbitrar "tendrá que tener en cuenta el elevado número de casuísticas, que son muy variopintas", especialmente en Málaga.

Ha precisado que en la provincia de Málaga hay "especial complejidad", ya que es donde se encuentran concentrados la mayor parte de chiringuitos, el 49 por ciento de toda la costa, y donde más casuística puede haber, especialmente en Fuengirola y Torremolinos, de manera que "hay algo más de 100 establecimientos pero se verían afectados por algo mas de 20, unos 24 como máximo, que son los que han iniciado el trámite y están en exposición pública, los otros no habían empezado el procedimiento y se quedan como están".

Ha precisado que en Granada, donde la costa es "más pequeña", los expedientes de concesiones de los chiringuitos estaban ya concluidos los procedimientos y éstos no se van a revisar, mientras que en Cádiz hay 14 expedientes, concentrados en Chipiona, que esperan que se puedan solventar.

"No son tantos los chiringuitos afectados, pero debemos conocer el dictamen del gabinete jurídico, para lo cual esperamos reunirse en septiembre para poder sacar adelante ese procedimiento", ha indicado Martínez Vidal, que deja claro que "si no hubiera salido esta sentencia, el compromiso adoptado en el Parlamento andaluz hubiera sido factible".

Por ello, reconoce que ese procedimiento "algo se retrasará, pero no es culpa nuestra, porque no sabíamos que existía el procedimiento, fue un recurso que un particular puso contra el reglamento, pero nos ha sorprendido que el Gobierno no nos dijera nada".

"Terminaremos cuanto antes el proceso pero con las máximas garantías, para evitar que haya más sobresaltos por posibles impugnaciones", ha aseverado Martínez Vidal, quien espera habilitar una solución en los primeros meses del otoño y poder despejar esas cuestiones jurídicas.

Así, apunta que "hay que ver qué dice el letrado de la Consejería; hay varias variables, por lo que veremos la más segura y la que nos pueda aportar la mayor celeridad, intentaremos que se culmine el proceso pero que se culmine bien; hay que apostar por aquello de vísteme despacio que tengo prisa; nos gustaría terminarlo con la mayor rapidez pero analizando toda la casuística", tras lo que apuesta por "remar todos en la misma dirección y mantener el buen entendimiento".