­El sindicato de enfermería Satse denunció ayer el «calvario» vivido por una paciente afectada recientemente por el cierre de camas en el Hospital Carlos Haya. Según aseguró el sindicato, esta paciente acudió a Urgencias el pasado 24 de agosto a las seis de la mañana donde, tras diferentes pruebas, tuvo que ser operada de urgencia pasando a la Unidad de Recuperación a las 21.00 horas. «Estando allí le informan de que no hay camas disponibles en el hospital por lo que debe permanecer en Recuperación toda la noche», apuntó Satse, que destaca que la paciente «se quejó amargamente de su situación», al no poder conciliar el sueño por la actividad de la propia unidad (sólo dispone de una habitación), estar sola (no está permitida la presencia continua de acompañantes) y no disponer de almohada «porque no quedaban». Al día siguiente pasó a la planta de Neurocirugía al no haber camas en Cirugía Digestiva (donde le correspondía) por estar cerrada en verano.

El día 27 recibió el alta pero la noche de ese mismo día volvió a Urgencias por encontrarse mal. Tras pasar toda la jornada en observación, fue intervenida por segunda vez el día 28 por la noche (le intervinieron de una peritonitis mediante laparoscopia), pasando de nuevo a Recuperación, permaneciendo allí de nuevo hasta las 14.25 horas de la jornada siguiente «por falta de camas». Actualmente, permanece ingresada en la planta de Cirugía digestiva.

«Satse se pregunta si esto es lo que el SAS y la dirección de Carlos Haya entienden por asistencia garantizada o planificación estival basada en criterios técnicos y experiencia acumulada», lamentó.