Era una posibilidad que se barajaba al principio del verano y que finalmente se ha hecho realidad. La escasez de lluvias en los meses del pasado otoño e invierno dejó a los pantanos de la provincia en una situación difícil para arrancar la temporada alta del turismo y el alto consumo de estos últimos meses debido a la masiva llegada de turistas ha hecho que la Junta de Andalucía haya decidido declarar la prealerta de sequía en los embalses del Guadalhorce, según confirmaron ayer fuentes de la Administración autonómica a este periódico.

Con unos niveles de llenado muy justos, sólo las últimas lluvias previas al verano hicieron que la provincia arrancara la época estival con ciertas garantías. Aún así, el embalse de La Viñuela, que abastece a la comarca de la Axarquía, entró hace días en situación de prealerta, dado sus bajos porcentajes de agua embalsada, una medida que ahora también se aplica al conjunto del Guadalhorce, formado por las presas de Guadalteba, Guadalhorce y Conde del Guadalhorce.

En el caso de La Viñuela, ésta se encuentra al 37 por ciento de su capacidad, con algo más de 61 hectómetros cúbicos, treinta menos que hace un año.

Los tres pantanos del Guadalhorce superan ese porcentaje, pero están por debajo de la mitad de su capacidad total. Así, desde que arrancó el verano, tomando como referencia el 1 de junio, el conjunto de embalses ha reducido su caudal en más de 42 hectómetros cúbicos, con el embalse del Conde del Guadalhorce como el que más bajo está, ya que se encuentra al 39,9 por ciento de su capacidad, con solo 26,55 hectómetros embalsados. El del Guadalhorce está al 55,9 por ciento, con 70,39 hectómetros, y el Guadalteba suma 63,13 hectómetros y está al 41,18 por ciento de su capacidad, según recogía la web Hidrosur ayer. En global, el conjunto de embalses del Guadalhorce alberga 160 hectómetros cúbicos, un 46 por ciento de su capacidad total.

El alto consumo que estos pantanos han registrado en estos meses es la tónica habitual del verano, cuando se dispara la demanda por la alta ocupación y más este año que el turismo está batiendo todos sus registros en llegada de viajeros.

A esta circunstancia hay que unir los riegos para la agricultura para mantener los cultivos de temporada y que pese a la situación excepcional de este año se han mantenido. Así, como ya anunció la Junta en su día, entre junio y agosto la previsión de riego era de unos 17 hectómetros cúbicos para atender la demanda.

Con el nuevo panorama que dibuja la declaración de prealerta, la Junta de Andalucía abogó ayer por hacer un consumo responsable de los recursos hídricos, una petición que dirige tanto a consumidores como a agricultores, para que sean cuidadosos con su gasto de agua y evitar que la situación se agrave más, a la espera de que la llegada del otoño pueda venir acompañada de las tan esperadas lluvias y alivie el estado de los pantanos.

Prealerta de sequía. Pese a que la situación es ahora mismo delicada, los embalses del Guadalhorce aún no han entrado en los parámetros que el decreto de sequía de 2005 recogía para declarar la alerta.

Entonces, los mínimos marcados hablaban de un mínimo de 109 hectómetros cúbicos acumulados en el sistema el 1 de junio y de 71, en octubre. El problema, no obstante, puede ser que el escaso nivel de llenado llegue a provocar que el agua embalsada quede inutilizable por su salinidad. Esa posibilidad ya había sido estudiada a principios de año por los técnicos de la Junta, que dibujaron varias hipótesis para el arranque del nuevo año hidrológico, que se produce el 1 de octubre.

Por ahora, los embalses del Guadalhorce se acercan a la hipótesis más optimista, que hablaba de un 42% de llenado tras el verano, mientras que la más pesimista situaba ese porcentaje en un 31%, si bien habrá que esperar a la evolución del mes de septiembre para ver en qué extremo se sitúan los pantanos.

A fecha de ayer, los embalses de la provincia de Málaga sumaban 276 hectómetros cúbicos, al 44% de su capacidad y con cien hectómetros cúbicos menos que en la misma fecha del año pasado.

Frente a la situación de La Viñuela y el conjunto del Guadalhorce, el pantano de la Concepción, que abastece a la Costa del Sol Occidental, es el que presenta mejores parámetros y se encuentra al 71% de su capacidad, con más caudal incluso que hace un año.