Las estadísticas inmobiliarias vuelven a señalar a Málaga como uno de los baluartes de la recuperación que viene experimentando el mercado de la vivienda en España. La provincia ha registrado un total de 25.877 compraventas en los últimos doce meses -de junio de 2015 a junio de 2016, según los últimos datos disponibles de Colegio de Registradores de la Propiedad-, un guarismo que supera en un 10,9% al del periodo precedente y que la sitúa como la provincia española con mayor número relativo de operaciones en relación a su nivel de población. Málaga arroja en ese plazo un índice de 15,97 ventas por cada mil habitantes, dato que supera a los de Alicante (15,60), Girona (11,24) y Baleares (11,22), las provincias que la siguen en este ranking.

En cifras absolutas, Málaga es la cuarta de España en número de compraventas, por detrás de Madrid (54.929), Barcelona (42.056) y Alicante (28.950) y por delante de Valencia (20.914), Baleares (12.520) y Murcia (12.435). En el conjunto de España se registraron en los últimos doce meses un total de 384.082 operaciones, con una subida del 14,6% sobre los doce meses del mismo periodo anterior.

El Colegio de Registradores de la Propiedad constata en su último informe de coyuntura, correspondiente al segundo trimestre de 2016, que se ratifica en España «el generalizado incremento de la demanda de vivienda, dando lugar a que trimestre tras trimestre se consolide un elevado número de provincias con crecimientos del número de compraventas de vivienda registradas».

La fortaleza del mercado sigue fundamentalmente sostenida por la vivienda de segunda mano (en Málaga este segmento concentra el 82% de las operaciones y a nivel nacional un 80%), donde se incluyen también a nivel registral las ventas de los pisos que pertenecen a la cartera de los bancos (y que habían quedado en sus manos a raiz de la crisis inmobiliaria procedentes en gran parte del sector promotor). En el caso de la provincia malagueña, la venta de inmuebles usados subió un 26% en los últimos doce meses mientras que la de viviendas nuevas, cuya oferta actual es muy pequeña, descendió casi un 30%.

No obstante, desde finales de 2014 el sector viene acometiendo la construcción de algunas nuevas promociones o reactivando las obras de otras que habían quedado en proyecto, debido a que el stock de pisos heredado del boom inmobiliario está prácticamente liquidado en las provincias donde el mercado es más dinámico (entre ellas por supuesto Málaga) y se percibe ya una nueva demanda. Esa dinámica estaría contribuyendo ya a un incipiente repunte de las operaciones de vivienda nueva, aunque con cifras aún muy modestas dentro del mercado. «Todo parece indicar que esta modalidad de vivienda está mostrando sus primeros signos de recuperación», sostiene el Colegio.

Como dato para avalar esta afirmación, este organismo recuerda que en el segundo trimestre de 2016 se han vendido más de 19.500 viviendas nuevas en España, lo que arroja su segundo incremento intertrimestral consecutivo (0,84%) después de un largo periodo de intensos descensos. En el caso de Málaga, el segundo trimestre de este 2016 registró 1.346 operaciones, con una subida de casi el 26% en relación al primero (aunque el hecho de que la subida porcentual sea significativa obedece a que venimos de niveles de actividad mínimos).

Vuelven las grúas. En la provincia, las grúas han vuelto a verse activas en estos últimos meses principalmente en Marbella y su entorno (Ojén o Benahavís) y en Málaga capital, sobre todo en la zona de Teatinos y en el litoral oeste, según explica el presidente de la Asociación de Constructores y Promotores de Málaga (ACP), Emilio López Caparrós, que también percibe mayor actividad en Mijas y, en menor medida, en zonas de la costa oriental como Nerja o Vélez.

«Las nuevas promociones que han empezado a construirse el pasado año estarán terminadas a finales de 2016 o a lo largo del primer semestre de 2017, con lo que las ventas de vivienda nueva deben ya de volver a crecer otra vez», comenta. El representante de los constructores se muestra «satisfecho» de la evolución del mercado en este 2016 pero se muestra aún muy cauto de cara al futuro, sobre todo por la incertidumbre política que vive España, que tras dos procesos electorales sigue todavía pendiente de la formación de un nuevo Gobierno. «Hay que ser muy prudentes, porque esa incertidumbre, que también puede afectar al futuro de la economía, puede hacer que la gente todavía se retraiga la hora de plantearse la compra de una vivienda», opinó.

El presidente de la ACP recordó que las ventas de viviendas en Málaga siguen sostenidas en gran parte por el turismo residencial -extranjeros y nacionales de otras provincias que adquieren en la Costa del Sol una segunda residencia- pero estima que la población malagueña, cuya demanda natural en condiciones normales se estima en torno a las 22.000 viviendas anuales, comienza a regresar al mercado. «Los bancos ya están más abiertos a conceder hipotecas, aunque las condiciones siguen siendo altas. Lo importante en este caso, es que baje el paro y mejore la estabilidad en el empleo para que puedan producirse un mayor número de operaciones», apuntó.