El joven malagueño Pablo Ráez continúa con su campaña de concienciación sobre la importancia de donar médula ósea a la vez que lucha contra la leucemia en el Hospital Regional de Málaga. Desde allí, Ráez comparte su experiencia como paciente en las redes sociales y en su última publicación pide que todas las muestras de apoyo se traduzcan en donaciones. "Agradezco mucho la difusión de apoyo hacia mí y hacia la donación, pero lo importante no es ni el apoyo hacia mí ni el apoyo hacia la donación. Lo importante es que todo el que pueda done", afirma tajantemente.
El desafío de Ráez es alcanzar el millón de donaciones, un reto en el que le han seguido miles de personas. En su mensaje de hoy insistía con firmeza en su propósito: "Si quieres donar, vas a donar. No te pongas más excusas. Y si difundes este mensaje que sea realmente para que lleguemos al millón de donantes". "¿De qué sirven 100.000 compartidos si no se hacen 100.000 donantes? ¿De qué sirven 100.000 likes si no hay 100.000 donantes más?", se pregunta.
Además de animar su campaña de concienciación, ha compartido las novedades en su estado de salud: "Me han quitado lo que creían que era el foco de fiebre, mi catéter. Llevaba con él más de un año, han sido unos días realmente duros: ya no distinguía la realidad. Parece que desde que me lo han quitado estoy mejor pero aquí las cosas cambian muy rápido". Prosigue relatnado con crudeza los efectos del duro tratamiento que sigue: "Pedí que me fueran reduciendo la morfina porque me estaban dando paranoias, pero reducirla significa que empiezo a sentir de nuevo mi cuerpo que ha estado dormido al sufrimiento. De verdad que, si no lo vives, no te puedes imaginar lo que es echar de menos poder beber agua".
Ráez es un joven deportista marbellí de 20 años al que con 18 años le diagnosticaron leucemia. Entonces consiguió un trasplante de médula que su mismo padre se encargó de donar. Hace unos meses, la enfermedad volvió y desde entonces se encuentra ingresado en el Hospital Regional de Málaga.
Recientemente compartió una fotografía en la que le acompañaba el actor malagueño Dani Rovira, quien le visitó en el hospital. Un gesto que sirvió para dar un nuevo impulso a la campaña de Pablo.
