­Málaga capital mantendrá los impuestos, tasas y precios públicos congelados en 2017, salvo el impuesto de Construcción (ICIO) y el vado de viviendas unifamiliares que bajarán un 5% en ambos casos, según el proyecto de ordenanzas fiscales aprobado ayer en junta de gobierno y que será llevado al pleno de este mes para su aprobación inicial.

Los impuestos y tasas para 2017 mantendrán y aumentarán las ayudas al IBI y especialmente a la Plusvalía, con importantes novedades en este segundo caso como que se amplía de 75.000 a 100.000 el valor catastral de las viviendas que pueden beneficiarse de una bonificación automática del 95% en caso de transmisión por muerte del propietario para el familiar que herede.

Tasa a empresas de telefonía. En cuanto a las ayudas al IBI, se mantienen todas las bonificaciones y como novedad para 2017, se ha elevado el límite de rentas de 11.182 a 12.673 euros anuales, un 13,3 por ciento, y se acuerda otra medida como es dejar fuera de cuantificación de rentas las prestaciones que por dependencia reciba la unidad familiar.

También se prorrogan otro año las ayudas al IBI especiales dirigidas a los contribuyentes que hicieron frente a la plusvalía en los años 2013 y 2014, cuando no bajó el valor catastral el Ministerio de Hacienda.

Habrá un nuevo concepto retributivo el año próximo como es la tasa por utilización de espacios públicos, subsuelo y vuelo por parte de las compañías telefónicas, una tasa que no ha podido ser aplicada hasta ahora por problemas legales y que podrá reportar mas de un millón de euros a las arcas municipales.

A su vez, se modifica la tasa por implantación de cajeros de entidades financieras para que coticen en función de la calle donde estén situados. Hasta ahora hay una tarifa única de 600 euros y a partir de 2017, un cajero de calle Larios, por ejemplo, tendrá una tasa de 1.200 euros, mientras que uno de Campanillas cotizará unos 570. La modificación, a aplicar a los 150 cajeros que hay en las calles de la capital, aumentará la recaudación por este concepto en unos 45.000 euros, mientras que ahora está en torno a los 85.000.

La bajada programada en el ICIO y los vados, así como el mantenimiento y aumento de las ayudas a diversos impuestos supondrán, según señaló el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, en la presentación de las ordenanzas, una rebaja fiscal para los ciudadanos de unos 12 millones de euros, dos más que en el presente ejercicio. La mayor parte de estos doce millones de rebaja fiscal saldrán de las ayudas y bonificaciones a la Plusvalía (unos 8 millones), al igual que en 2016.

La recaudación total por impuestos y tasas que se prevé en 2017, aunque no está precisada, no variará sustancialmente de la de este año, pues los dos millones en que bajará se verán compensados con la recaudación de la nueva tasa a las compañías telefónicas y el aumento de ingresos por cajeros de banco.

En la misma medida que impuestos y tasas, también quedarán congelados los precios públicos del transporte (billete de a EMT) y los de la Sociedad de Aparcamiento, (Smassa) es decir, grúa, aparcamientos públicos y aparcamiento limitado.

Igualmente, los precios de los servicios funerarios de Parcemasa no suben por séptimo año consecutivo y se amplía la carta de servicios.

De la Torre destacó que se mantienen los beneficios fiscales aplicados en 2016 para fomentar el empleo. También se consolidan la ampliación de las bonificaciones en la tasa de recogida de residuos sólidos para centros educativos; en la IVTM en vehículos ecológicos; no se cobra la tasa de transmisión de puestos de mercados municipales, y se mantiene la reducción del 30 al 29 por ciento en el impuesto de plusvalía o los benéficos fiscales en el Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras.

Otras novedades de menor índoles para 2017 son la derogación de la tasa que hacia tributar la expedición de ciertos documentos municipales, el bastanteo de poderes y otras actividades administrativas recogidas en la ordenanza 11.

Bajar la presión fiscal. Por último, se crea una nueva tasa para el canon que deben pagar los concesionarios de un servicio (cafetería o bar) en edificios e instalaciones municipales, como centros sociales.

El alcalde quiso sacar pecho con estas medidas, que suponen que «en 2017 no sólo se mantienen el esfuerzo y las medidas excepcionales para la reducción de la presión fiscal implementadas este año, sino que la propuesta contempla aplicar nuevas bajadas en determinados tributos, así como más bonificaciones y ayudas fiscales». Por ello, insistió en que «no sólo no suben los impuestos sino que se consolidan las medidas adoptadas de manera coyuntural para 2016 y se contemplan nuevas acciones que ponen de manifiesto el interés municipal de proteger a los colectivos más vulnerables, así como de favorecer la reactivación económica y el empleo».