Malagueño de 31 años, José Ocón trabaja de administrativo pero entre semana -todas las tardes salvo los martes, que trabaja- coordina la Asociación Victoriana de Capuchinos y de la Fuente, que fundó y preside desde hace cuatro años, pero además, los fines de semana está al frente de la histórica Peña Victoriana El Rocío, que hace un año salvó de la desaparición y en 2017 celebrará las cuatro décadas.

«Con coraje, valentía y ganas se pueden llevar las cosas adelante», resume. Los números respaldan a este joven porque la aventura vecinal que comenzó con siete socios tiene hoy 430, y la peña, en la que entró con menos de 50 socios, cuenta ya con cerca de un centenar más de personas.

A su juicio, la clave está en la colaboración: «En la asociación de vecinos estamos metiendo un equipo muy amplio de personas, con 18 monitores, una directiva de 12 personas y un equipo de 33 voluntarios, incluido la directiva».

Tantos colaboradores, y de las edades más variadas, permiten, por ejemplo, que la asociación cuente con 20 talleres con listas de espera, además de un coro y un grupo de baile joven.

La peña, en la calle Fernando el Católico, ha sido remozada y también puesta al día en lo económico. «Nadie quería el problema, y eso que era una peña con una historia flamenca y cultural bastante importante en la Victoria y en Málaga. Yo la conozco desde chico de haber estado en comuniones y cumpleaños», dice José.

En cuanto a la sede vecinal, en la calle Jonás, ha sido posible por una cesión gratuita del constructor Cristóbal Peñarroya, al que José Ocón quiere agradecer «su apoyo constante y también el de su familia». Pero el éxito de la asociación ha provocado que se haya quedado pequeña hace dos años. «La asociación tiene un freno porque no tenemos espacio suficiente para realizar los talleres que nos demandan. Llevamos un año negociando con el distrito para que nos busque una sede», explica el presidente.

La asociación, por cierto, además de formación para sus socios recoge las quejas vecinales de la Victoria, Capuchinos y Fuente Olletas. «Ojalá tuviéramos un barrio en el que hubiera piscinas públicas, más zonas deportivas y zonas verdes. El problema es que tenemos un barrio muy poblado».

En breve, la Peña Victoriana El Rocío celebrará los 39 años y José Ocón cuenta que hay preparada una fiesta para los socios con tres horas de actuaciones y sorpresas. Con sólo 31 años, ha insuflado vida vecinal a la parte norte del distrito Centro y recuperado una peña histórica del barrio.

El director del distrito Centro, Francisco Cantos, explicó ayer que el Ayuntamiento conoce bien la escasez de espacio de la sede de la asociación de vecinos, «y nos preocupa» porque es «un colectivo muy numeroso y con muchas actividades». «Estamos tratando casi desde el primer año de su fundación de buscar alternativas de cesión de espacios públicos. De momento lo que hemos podido considerar por la zona no es de titularidad municipal», declaró.